Los otros días nos llevamos un susto de muerte, y es que mi suegra no huele demasiado bien y cuando entramos en su casa, descubrimos que estaba saliendo un olor a cables quemados de uno de los enchufes, por lo que llevamos a tiempo a que ocurriese una desgracia. Una vez que quitamos toda la corriente eléctrica por medio del cuadro eléctrico, llamamos a unos electricistas para que comprobasen toda la instalación y evitar de esta manera un riesgo de incendio si se volvía a encender todo. Parece ser que el problema venía de una pequeña estufa que estaba ya muy tocada, por lo que la tiramos y nos decidimos a comprar una nueva para evitar riesgos innecesarios.