A veces recuerdo cuando veía de pequeño South Park, una serie que empezó siendo muy bizarra pero que, a pesar de seguir siéndolo, está mejorando con los años y que se ha vuelto muy crítica con los mensajes que manda. Uno de los puntos que más gracia me siguen haciendo es cuando Cartman decía que él no estaba gordo, sino que estaba fuertecito, algo que yo estuve repitiendo durante bastante tiempo hasta que me puse serio, compre una báscula de cocina con análisis nutricional y me iba todos los días a correr y a ***** pesas. Al final si estuve fuertecito pero de la otra manera de la que hablaba el gran personaje de esta serie.
Marcadores