A su antojo. Pero ya no va a ninguna iglesia.
Otra pose suya, publicada por él en internet.
Dice que Dios le salvó la vida,
pero se rehúsa a reconocer que la intervención quirúrgica la realizó un cirujano cardiólogo.
Dios no solamente juega a los dados
sino que los lanza donde no se les puede ver.
Entonces, aplícatelo a ti mismo, Elvis Sibilia, y reconoce que te has equivocado.
Te quedaste MUDO, una vez más ...
Errare humanum est; perseverare, diabolicum.
Ya sabes, Elvis Sibilia; puedes presentar tus disculpas públicamente.
Marcadores