Scheini, cuelga el teléfono. Se queda pensando un rato. Sabe que tendrá que de alguna manera zafar del lío que significa esto de las cajas que desaparecieron.
Aunque, él sabe, que las cajas están guardadas en el sitio 9, de la Empresa portuaria, y que a nadie se le ha ocurrido que estén escondidas tan cerca, de donde desaparecieron. El típico truco, de esconder cerca de todos lo que se supone está escondido lejos.
Scheini sabe, que no puede equivocarse de nuevo.
Porque, todo ha sido una metida de pata de él, ya que, las cajas con armas, debían ser embarcadas de inmediato, en el momento que las sacaron del sitio 3. Debían embarcarlas, rumbo al puerto de Callao y de ahí, saldrían por tierra, al país que las había comprado.
Todo este malentendido, se debió, a que él en esos días estuvo enfermo, con una gripe espantosa. No pudo ocuparse debidamente, de todo el proceso.
Sus otros compañeros de la Mossad, no sabían del todo, de los tratos que él había hecho, para revender las armas.
Ellos creyeron, según él los convenció, porque confiaban en su criterio, que las armas estaban destinadas al país del Caribe, porque así se había dispuesto, por sus jefes de la Mossad.
Marcadores