Los creyentes se quedan pasmados ante los loros parlanchines diciendo que su maravilloso Dios les dio la capacidad de imitar sonidos y/o voces humanas, olvidando mencionar que los loros NO entienden NADA de lo que repiten.
En cambio, ese mismo Dios que dizque les dio el habla a los loros parlanchines, se la negó a los perros, a los gatos, y a demás animales domésticos con quienes hubiéramos querido poder conversar ...
Callan los "creyentes" aquí también.
¿ Verdad, Mihael ?????????
Esos loros hablan más que Mihael.
Te toca, Ruth Esther, amiga adventista.
No me digas que no opinas nada aquí tampoco ...
Te toca, Intelectito.
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