Iniciado por
Josafat
Hay personas que no comprenden porque debemos guardar los mandamientos de Dios si somos justificados por la fe. Hay que comprender correctamente el tema de la salvación.
En Hch 4:12 leemos: "Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos."
Solamente en Cristo hay salvación, no nos salvamos por nuestras buenas obras. La salvación es un presente que Dios nos da si nosotros lo aceptamos.
Esto es confirmado por Pablo en Ef. 2:8,9 cuando dice: "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe". Nuestra participación en la salvación consiste en aceptar a Dios.
Esto es importante para comprender el papel de la ley. Lo que justifica no es la ley sino la gracia. En Ro 3:20 leemos: "ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado".
Por medio de la ley uno no se salva. La ley existe para mostrarnos la realidad de nuestros pecados. Y esto es lo que Pabo completa en Ro 7:7: "¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás". Aquí presenta Pablo la verdadera función de la ley que es que estamos en una condición de pecado.
St 1:22-25 confirma esto: "Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
" Lo que dice Santiago es que la ley es como un espejo que refleja nuestros pecados. Pero lo que nos justifica no es "el espejo", sino la gracia dada por Cristo. Pero una vez que nos hemos purificado con la gracias de Cristo no debemos tirar la ley a la basura. El papel de la ley es importante porque muestra nuestros pecados. Hemos sido salvados por la gracia de Dios pero no la debemos tirar a la basura porque somos pecadores y como sabremos que hemos pecado si no hay ley.
En la ley se condensan todas las enseñanzas de Dios. Por ejemplo como sabríamos que el adulterio es pecado si la ley no dijera: "No adulterarás." Esto es lo que Pablo dice. La función de la ley no es salvar sino mostrarnos nuestra realidad para así acercarnos a Cristo y todos los días necesitamos ser llevados a Cristo.
La ley nos muestra la necesidad de ir a Cristo porque es él quien nos justifica. Todos los días debemos ser justificados, es decir perdonados. Todos los días dependemos de Jesús. El fin de la ley es Cristo, no salvarnos.
Algunos cristianos creen que el hecho de ser salvados por la gracia anula la vigencia de la ley pero si vamos a 1 Jn 3:4 leemos: "Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado es infracción de la ley." Finalmente vemos aquí que la ley es la infracción de la ley.
Si Jesús hubiera abolido la existencia de la ley en la Cruz también entonces habría abolido la existencia del pecado. Si a partir de la Cruz ya no existe más ley entonces tampoco existe mas pecado. Entonces de que nos sirve la gracia de Cristo si ya no existe el pecado pues fue abolida la ley.
Otro versículo que confunde a muchos cristianos es Ro:6:14: "Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia." Y concluyen que únicamente se salvan por la gracia de Cristo y no por la obediencia de la ley. Y este pensamiento es correcto como dije anteriormente: Nadie se salva guardando mandamientos.
Estar bajo la ley no quiere decir que se salva guardando mandamientos y estar bajo la gracia no quiere decir que la ley no tiene ningún valor. Significa el versículo de Romanos 6:14 que no importa la infracción a la ley porque estamos bajo la gracia. De ninguna manera, lo que sucede es que muchos Cristianos se quedan con este versículo y no toman en cuenta lo que continúa diciendo Pablo en el versículo 15: "¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera."
Hay otro versículo que debemos leer que es Ro 3:31: "¿Luego por la fe invalidamos la ley? En ninguna manera, sino que confirmamos la ley".
Aquí queda definitivamente claro que la fe no invalida la ley sino que la confirma. Inclusive guardar los mandamiento no lo podemos hacer por nuestras fuerzas sino por la fe, es Jesucristo que lo tiene que hacer por nosotros.
Jesús es el que te salva, y mantenerse salvo es mantenerse en obediencia a la ley de Dios pero no significa que la ley te salva sino que mantenerte salvo es mantenerte en obediencia a la lay de Dios. El que está condenado por la ley no es el que la guarda, es el que la desobedece.
La condenación no es para el que cree en la gracia de Cristo, no es para el que cumple, para el que obedece los mandamientos. La condenación es para el desobediente.
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