Los días lentos y sinuosos pasan casi desapercibidos, en los ventanales se reflejan las gotas de lluvia, el frío arrecia sin dudar, que ya el Invierno se aproxima, este nos deja muestras de su andar, árboles. arbustos y demases que pueblan los parques y plazas, se preparan para quedar sin vestiduras ni nada que los adorne, porque somos pasajeros de vidas propias, a veces ajenas, no sabemos cuando empieza realmente el tiempo misterioso.
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