Iniciado por
VanSword
En su momento te lo expresé en el post #7, de la siguiente forma: "siguiendo las pistas que Dios mismo va dando" esa en mi experiencia, es la palabra que viene de Dios, cuando nos revela su voluntad (en tiempo real)
La forma en que he concebido a Dios ha sido la forma en que Dios se ha revelado a mi -no con afán de llevarte la contra, sino con afán de que aprovechemos lo diverso que es el Espìritu de Dios y sus caminos- a ver si con esto nos edificamos mútuamente.
En mi experiencia Dios salva a quien desea y es su Espìritu quien sella a quien desea salvar, por ende, Él nos amo primero y decidió acercarnos a sí mismo.
No nos podemos acercar a Dios si Dios no nos llama primero de una forma que le podamos entender, y esto lo hace con su Espìritu, con su voz.
Las escrituras sin el Espìritu de Dios no tienen -vida- o "espìritu", valga la redundancia.
He podido constatar que el Espìritu de Dios no está atado a un libro sino que La Palabra va y viene como quiere, pues es -en este caso- el Espìritu de Dios.
En mi caso particular no puedo darme el lujo que describes y te diré por qué (agárrate fuerte)
Mi experiencia con Dios ha sido extrabíblica, cuando llegué a conocer las escrituras -independientemente de aquellas cosas que por no tener contexto histórico no les iba a ver sentido- no tengo conflicto ni queja contra ellas, pues están como están y son como son por la misma divina providencia de Dios.- cuando la leí por primera vez confirmé lo que Dios ya me había revelado, lo que había "escrito en mi corazón" (tal cual como funciona el nuevo pacto) y pude reconocer su Espìritu en ellas, si bien mi lenguaje mejoró, toda la temática elemental ya era parte de mi -te imaginarás mi sorpresa.
Creo que cuestionar las escrituras es un ejercicio sano mientras seamos conscientes que por medio de dichos cuestionamientos podemos saber qué parte de nuestra carne está aún sin sacrificar, no para ser robots, sino para ser personas maduras -que es algo fácil de decir pero dificil de lograr.
Esto es, listos para toda buena obra.
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redarguir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra...
2 TIM 3
Pero para mi, las escrituras son un esfuerzo grandísimo de nuestra gente (inspirada por Dios) pero no lo son todo ni en ellas está toda la revelación de Dios, pues Dios en realidad existe fuera de la Biblia, asì como la ocupación de carpintería -por ejemplo- existe fuera de una universidad.
El único camino a la verdad y la vida es Jesucristo, y su persona -he podido constatar- llega a quien quiere, aún sin necesidad de emisarios si fuera necesario.
Porque creo fírmemente que Dios no está atrapado en una biblia ni tampoco está secuestrado por nadie, nosotros no somos dueños de Él, sino que Él es dueño de nosotros.
El Espìritu de Dios va a quien quiere, como fue con Saulo de Tarso aquella vez -por darte un ejemplo-
Te comento que de quién no dudo es de Dios,
Pues el principio de la sabiduría es el temor de Jehová -para empezar-
Esto me ha permitido ser prudente para no pecar contra Él ni unirme a quienes hacen el mal "derramando sangre" -que es lo que declaras que encontraste en este foro.
¿Te impresionó llegar a este foro? te comento que este Sodoma y Gomorra no es desconocido para mi y creeme que he estado lugares 1000 veces peores aún que este -donde he sido enviado.
Dios no ignora lo que sucede mi estimado.
Yo diría que la infalibilidad la da el Espìritu de Dios.
Me gusta la pasión con la que te expresas, somos células de un mismo cuerpo, distintas, pero de un mismo cuerpo.
En esto si te tengo que corregir pues yo nunca fui ni he sido uno de ellos.
Trabajo en las obras de nuestro Padre desde que tenia 4 años de edad -aún antes- porque así lo quiso Él.
Esto que digo no me da autoridad sobre nada ni sobre nadie, no lo conozco todo ni tampoco aspiro a conocerlo todo, prefiero vivirlo todo y aquellas cosas que Dios me de, sea mucho o poco, busco ser fiel por amor a aquello en mí de Él que decidió poner en mí y a las personas que me dió.
Que lo que nos una sera mayor que lo que nos separe.
El que la buena obra empezó, será fiel en completarla en ti.
Marcadores