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María_Laura3
No, Shetland. Lo que no es correcto es lo que no coincide con el Evangelio y lo contradice, que es muy diferente a lo que tú quieres hacer ver. No se trata de enseñar lo que a cada uno le conviene, sino lo que está de acuerdo con lo que Jesús enseñó, porque Jesús es el camino, y la verdad, y la vida, y lo que Él enseñó es la enseñanza verdadera que viene de Dios y los mandamientos que en verdad fueron dados por Dios.
Entonces sí que cuentan todas las escrituras que no contradicen a las enseñanzas de Jesús. Sólo los mandatos que Jesús anuló son los que digo que no son mandatos dados por Dios, sino mandatos de hombres, pues Jesús, que es Dios mismo que se hizo carne, no anuló la Ley que en verdad había dado El mismo en la época de Moisés. Él anuló los mandatos de hombres que fueron atribuidos a Dios y restableció los mandamientos que en verdad había dado El mismo en la época de Moisés y para siempre.
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Shetland
Ok, ok, veamos.
Háblame, por ejemplo de la Ley del Talión, ¿Jesús la abolió?......
Examina lo que Jesucristo te enseña en el Evangelio:
"Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa....... ". (Mateo 5:...)
La ley mandaba que si alguien hería a alguien, también se hiriera de la misma forma al que había hecho el daño. Pero Jesucristo mandó que al que te hiera en una mejilla, le vuelvas también la otra. Entonces, Jesucristo abolió el hacer daño a las personas que habían hecho algún daño.
Es bien sencillo: "a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra"
podríamos decir, inclusive que la reforzó con la
regla de oro en
Mateo 7:12 ¿Conoces el pasaje, no?........
La Ley de Jesucristo escrita en Mateo 7:12, la Regla de Oro, es totalmente contraria a la ley del Talión, pues lo que manda la Regla de Oro es que hagas con los hombres lo que deseas que ellos hagan contigo, no que hagas con los hombres lo que ellos hayan hecho contigo.
La ley del Talión mandaba hacer a los hombres el mismo daño que ellos hubieran hecho a los demás, pero la Ley de Jesucristo manda no hacer a los demás el daño que no deseas que te hagan a ti. Fíjate si son completamente contrarias la Ley de Jesucristo y la ley del Talión.
"todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12)
Esta Ley te dice que si tú quieres que te perdonen, que perdones tú a los demás. Todos somos pecadores y todos necesitamos ser perdonados, y debemos perdonar a los demás si queremos que Dios nos perdone a nosotros, pues así dice el Evangelio:
"Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas". (Mateo 6:14)
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