El Chueco, ese día se levantó de mal humor, tenía una resaca, de esas que son de tener la cabeza como un bombo, las piernas le dolían y tenía la boca seca... ( post 123...El Chueco )
Llamó, con su voz de trueno:
¡¡Mijita, me preparó la choca!! ( desayuno u onces en chilensis vulgaris )
¡Si mi amor, le responde la Rosalía!
Ya está todo listo en la mesa...
Atenta, ella con su hombre, que aunque brusco en sus modales, ella le conoce su lado tierno, sobretodo en la noche, cuando él la acaricia tiernamente...Ella sabe de é, mucho más de lo que él sabe de ella.
Hace como dos meses, que están viviendo en Puertas Negras, el barrio de Playa Ancha, donde vive el primo hermano, de su marido.
Este decidió mudarse, después que en Ventanas, donde habitaban hubo un robo y casi El Chueco lo agarra La Pesada, por sus antecedentes.
Menos mal, que le pidió ayuda, al Inspector Soto, este no se quedó y le sugirió el cambio de domicilio.
Por eso, aunque a la Rosalía, no le gustó mucho el cambio, se ha tratado de adaptar...Le ha costado aprender, donde están los mejores precios de los abarrotes, de las verdulerías ( al Chueco le encantan las ensaladas y los porotos con rienda ) Ella es una excelente cocinera.
El Chueco, devora los panes amasados con quedo de cabra, y el te caliente a sorbitos. Ella lo mira con adoración...
El le dice:
Hoy viene el Inspector Soto...
¡Siiii!!!
¿ Por qué? le dice ella curiosa...
Porque tiene un lío con unos orientales...y quiere que lo ayude con estos malandras...me parece que son de una organización mafiosa...No se de donde...
El no tiene idea, que se meterá, en un enorme intringulis, de situaciones violentas...Porque no sabe, ni Soto se lo ha comentado, que los orientales son japoneses de La Yakusa.
La Rosalía se queda pensando...
¿Que será el "" encargo"" que le hará Soto a su marido ?
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