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Porque25
La Ley natural creada por Dios se descubre en los deseos sexuales que viven y sienten las personas..., Jesucristo no prohibió que los hombres amaran a otros hombres, lo que prohibió es que los hombres dejaran de amar a las mujeres... Debemos amarnos todos "unos a otros" como mandó Jesucristo...
Las leyes que prohíben que los hombres amen a otros hombres solo son preceptos judaizantes escritos en el viejo testamento judío, pero esos preceptos faltos de misericordia fueron abolidos por Jesucristo porque solo eran preceptos de hombres...
El Evangelio de Jesucristo no condena a los hombres por amar a otros hombres, ni a las mujeres por amar a las mujeres... Esas condenas solo vienen en los preceptos de los hombres del viejo testamento judío y en las cartas atribuidas a Pablo torcidas por los indoctos...
Jesucristo no mandó predicar ni las leyes del viejo testamento judío ni los puntos difíciles y torcidos de las cartas atribuidas a Pablo contrarios a lo que manda el Evangelio. Jesucristo mandó que nos amaramos unos a otros todos los cristianos (mujeres y hombres)...
Las personas se aman no solo por la necesidad de tener hijos, las personas también se aman por que tienen deseos o necesidad de amarse, abrazarse y besarse..., y esas necesidades son santas por que fueron creadas por Dios para que las personas se amen y disfruten...
Doctrina anti-evamgelica es la tuya, que te sales de lo que manda el Evangelio para imponer leyes diferentes a lo que manda el Evangelio... Las leyes del viejo testamento y las cartas atribuidas a Pablo, no son el evangelio de Jesucristo... son otras doctrinas diferentes donde se mezcla el trigo con la cizaña...
Las cartas atribuidas a Pablo fueron torcidas por los indoctos, como nos dice el apóstol Pedro:
"...Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición. Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo". (2ª Pedro 3:15-18
Como puedes ver, el apóstol Pedro te dice que si no quieres ser confundido por las cartas torcidas de Pablo, que crezcas en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
Esto es lo que dejó escrito Pedro sobre las cartas de Pablo, que los indoctos las torcían y por eso debemos crecer en el conocimiento de Nuestro Señor Jesucristo, esto es, el Evangelio... Y el mismo Pablo, sintiendo que sus cartas podían ser torcidas o mal interpretadas para predicar cosas contrarias al Evangelio, también nos dice:
"Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema". (Gálatas 1:6-9).
Pablo también nos avisa que tengamos cuidado con las cartas atribuidas a él:
"no os alborotéis tan fácilmente, perdiendo el buen sentido, ni os alarméis con motivo de ciertas inspiraciones o afirmaciones ni por carta como si fuera nuestra..... Nadie os engañe en ninguna manera".(2ª Tesalonicenses 2:2-3).
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