Siempre cuando compramos algún alimento elaborado, nos encontramos en la lista de los ingredientes con una retahíla de unos Es con un número detras muy poco explicativo.
Los aditivos alimentarios no necesariamente son malos, en ocasiones incluso son muy necesarios para mantener el alimento en un estado saludable, pero por otro lado hay muchos que sólo sirven para disfrazar una pésima calidad del producto y en ocasiones, como ciertos potenciadores de sabore pueden producir alérgicas en ciertas personas, a pesar que son de procedencia natural, como el famoso glutamato sódico, amino ácido contenida entre muchas otras en la papaya.
Pero tampoco nos podemos fiar mucho de la etiqueta "Sólo ingredientes naturales", ya que algunos aditivos, aunque natural, por lo menos son poco apetecibles, como veremos con el ejemplo de un yogur con sabor a fresas, esto es, en vez de "con" leemos "con sabor a", esto significa que este yogur no ha visto una fresa en su vida, sino tiene un saborizante obtenido del serrín y si el colorante es encima el E120, bon apetit, ya que este colorante se llama tan piadosamente Carmín (también ingrediente de muchas pintalabios chicas) que se obtiene de la cochinilla (Kermes vermilio) una especie de pulgones que se machaca. Natural si es, pero....
Sin embargo hay otros aditivos que realmente son necesarios y no ofecen problema alguna, por ejemplo los estabilizantes o gelificantes, necesarios para mantener la consistencia de cremas, pudins. suellen se r diferentes harinas o gelatinas (ojo los veganos que deben tener en cuenta que la gelatina es obtenido de la piel y huesos de animales, la alternativa es el gelificante Agar-Agar que procede de algas del mismo nombre u otros de plantas gominosas y ciertas celulosas que llevan un E seguido con un número entre 400 y 469)
Igualmente necesario son los conservantes, muy importantes para la salud en ciertos alimentos perecederos. No suelen ofrecer tampoco grandes problemas, ya que como conservantes encontramos en la mayoría de los casos el ácido ascórbico, también conocido como vitamina C, el ácido acético, entre amigos el vinagre de toda la vida o también el ácido cítrico, pues esto, como dice el nombre.
En general, no nos deben asustar estos números E, pero si conviene leer siempre bien las etiquetas para que no nos venden gato por liebre
Para los que quieren informarse más en detalle recomiendo de consultar el diccionario de los aditivos alimentarios
(no puedo poner links todavía, por esto tenéis que sustituir las comas por puntos en la dirección)
www,aditivosalimentarios,com
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