Mi alma pasa por momentos de fantasmas
recuerdos alegres y de espejos de memoria.
La única pérdida que tememos
se ha producido.
Te has ido hijo de mi alma
yerto en la camilla te he visto.
Pasan por mis ojos perdida la mirada
¿ No nos veremos nunca más?
Entre estas sombras de los días aciagos
cuido tu recuerdo; amparo tu ternura de niño.
¿Adonde has ido?
Estas en mis retinas, no te has perdido.
Sobre las hojas del Otoño siento tus pisadas...
No te has ido...no te has ido...
Marcadores