¿ Tú también eres como Crisol, Piperss ?
¿ Tú también eres como Crisol, Piperss ?
no somos quienes seres humanos finitos para cuestionar los procederes de un Dios infinito
Yo claro que conozco ese pasaje de la Biblia pero ni tu ni yo somos Moises. Ni somos quienes para cuestionar lo que hace Dios. Yo conozco la Biblia muy bien desde Genesis hasta Apocalipsis. Parece que tu no conoces lo que es la oracion intercesora.
Última edición por Africano; 18/08/2015 a las 13:33
Dios había desheredado a Israel; ya no hablaba de él como de "mi pueblo" sino le decia a Moises tu pueblo. Había quebrantado el pacto hecho con Dios, y se había apartado de su cuidado y dirección. El odio al pecado es inherente al carácter divino. Dios ama al pecador, pero odia el pecado. Moisés, muy alejado del campamento, no sabía lo que estaba ocurriendo abajo. Hacía tan sólo unas pocas semanas desde que el pueblo se había comprometido en un solemne pacto con Dios y le había prometido obedecerle. Ahora ese pacto había sido quebrantado. Al no tener "raíz" en sí mismos, cuando sobrevino la tentación cayeron fácilmente en el pecado. Muchos de ellos, especialmente las personas que no eran israelitas, fueron vencidos por sus viejas prácticas idolátricas. La expresión "de dura cerviz" da la idea de caprichosa obstinación, como la de un caballo que endurece el pescuezo cuando se tiran las riendas hacia la derecha o hacia la izquierda, negándose a seguir en la dirección deseada. Ahora, pues, déjame. Dios estaba probando a Moisés y preparándolo para lo que vendría en el futuro. Esta no fue la última vez cuando pasó por tal experiencia. Moisés percibió que la propuesta de Dios no era definitiva, e intercedió por su pueblo. El Señor puso ante Moisés la oportunidad de elegir entre su propia gloria, y la honra de Dios y el bienestar de los que estaban bajo su cuidado. Noblemente estuvo a la altura de la situación y probó su leal consagración a Dios y a la tarea que se le había encomendado. Moisés replica que Israel es todavía el pueblo de Dios, y no suyo. Dios había hecho tanto por ellos que seguramente no los dejaría ahora, reconociendo así el fracaso de su propio plan. Moisés puso eso como primer argumento, afirmando que Dios no podía retractarse. Moisés no podía excusar el pecado de su pueblo, pero podía interceder por él para que fuese perdonado
Las naciones circunvecinas habían sabido de la maravillosa liberación de los hebreos de Egipto y, como resultado, temían lo que el Señor pudiese hacer en favor de Israel. Por lo tanto, si Israel era destruido, los paganos se regocijarían y Dios sería deshonrado. Las acusaciones de los egipcios resultarían verdaderas y se vería que en vez de llevar a su pueblo al desierto a sacrificar, lo había llevado allí para ser sacrificado. El segundo ruego de Moisés fue que se evitara que los paganos se regocijaran en triunfo sobre Israel. En tercer lugar, Moisés le recuerda a Dios sus promesas a Abrahán, a Isaac, y a Jacob. Hasta ese momento las promesas sólo habían tenido cumplimiento parcial, pero seguramente Dios no faltaría a su palabra.El Señor se conmovió por la oración ferviente y desinteresada de su fiel siervo. Dios no podía rechazar los ruegos de uno que pensaba más en su pueblo que en su propia exaltación y honor. ¡Qué tributo para el carácter de Moisés! ¡Qué revelación del amor divino! Las palabras "Jehová se arrepintió" son un débil intento de expresar la voluntad divina en lenguaje humano. En realidad, Dios no puede cambiar de propósito, porque conoce "lo por venir desde el principio". Sin embargo, cuando los pecadores abandonan el pecado y se vuelven a él, cuando sus hijos le suplican misericordia y perdón, entonces Dios se "arrepiente". Cambia de la ira a la misericordia, del castigo al generoso perdón.
A ver si otros creyentes vienen ...
Eso no se llama reprension sino INTERCESION
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