Hermoso testimonio de una señora puertorriqueña que fue testigo de Jehová bautizada, y cuyo espíritu
se salió de su cuerpo, experimentó la angustia de las tinieblas en las que se encontró, y volvió a entrar en su cuerpo mientras estaba hospitalizada.

No se lo pierdan, amig@s, especialmente Davidmor y demás "testigos" que participan en nuestros foros. Saludos.