El carnaval
Los pies se removían inquietos. Aunque estaba sentada en una silla, ella danzaba. Lo hacía mentalmente, seguía el compás de la música, y todo su cuerpo aunque permaneciera en una silla, se movía acompasadamente. Lo hacía sin darse cuenta, probablemente si hubiera sido consciente de aquel movimiento, se hubiera reprimido
.-Cerró los ojos se olvidó que estaba en una sala de baile.
-Era feliz. La música la transportó a lugares lejanos, donde el ritmo y el jolgorio formaban parte de sus vidas. ¡Lo que daría, por poder estar en aquel lugar, donde el baile formaba parte de su cultura!
-Todo a su alrededor era alegría, movimientos alocados de brazos y pies danzando al compás trepidante de la música que incesante llenaba todos los sentidos
.-Un grupo de bailarines venido de lugares lejanos, se contorsionaba al ritmo trepidante, moviendo sus caderas y abriendo los brazos animándoles a que se unieran a la danza.
.-Notó en su hombro, que alguien apoyaba su mano.-No era un completo desconocido, lo había visto por los pasillos del Instituto.
-No podía oír su voz, pero vio que extendía su mano, para sacarla a bailar.-Se levantó con una sonrisa, y juntos danzaron aquella explosión de ritmo y cadencias sensuales.
-Después de aquel baile estaba segura que entre ellos dos, podría surgir otro encuentro. Y la idea no le desagradó en absoluto.-
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