Eran las mismas bestias cabalgando, fieras;
hundiendo sus huellas bajo aquel suelo eriazo
que tenía un estandarte tan fino y sensual;
parte medieval de tu cuerpo: tus piernas,
sueños etiquetados con la palabra "fugaz"...
Bajaba el Olimpo sin asco al mar,
tus manos no estaban, tus Dioses se van;
el cielo comía papeles, el letargo...
tu boca besaba vacía, sin agua, sin pan...
Huérfanos mis labios, abiertos y esperando
la presencia del aire mío, del frío,
no puedo sentirlos, como tú no sientes!
lágrimas, sonrisas, esperanzas, cansancio...
decidido,
olvidado,
perdido...
comprendo ahora, me resigno y digo:
era ese nuestro amor, nuestros sueños
míralos!! se van contigo,
cremados, vendidos,
marchitos,
se van,
se van rendidos....
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