Solía mi madre decirme, y bien cierto es, que hasta lo más grave se aprecia de forma distinta según la persona, la circunstancia, la situación... en resumen aquello del "cristal con que se mira". Me decía, también, que en la poesía está casi todo lo importante de la vida si lo sabemos encontrar. Me recitó desde la cuna y nunca se lo agradeceré bastante. Respecto a lo que mencioné al principio, recordaba esta poesía de Campoamor, que mucho me hizo pensar alguna vez y que hoy, no sé por qué he recordado y he pensado que sería buena idea compartirla en este foro, para ver que opinan vds. del mensaje o mensajes que conlleva.
Pobre Carolina mía,
nunca la podré olvidar
ved lo que el mundo decía
viendo el féretro pasar:
Un clérigo, empiece el canto,
el médico cesó el sufrir,
el padre, me ahoga el llanto,
la madre, quiero morir.
Un joven, !qué bella era!,
una joven, !qué adornada!,
un anciano, feliz ella,
una anciana, !desgraciada!.
Descanse en paz, dicen los buenos,
adiós, dicen los demás.
Un filósofo, uno menos,
un poeta, un angel más.
Ramón Mª de Campoamor
Y a nosotros, ¿qué nos sugiere?..... Final abierto Ebúrnea
Marcadores