Y besaría tus sueños por mil noches,
y tus labios velarían mis sueños.
y soñando y besandonos, llegaríamos a la eterna alba,
esa que con sus estrellas nos abriga...

Deja que te ame hasta que caiga la noche, dejame que te sueñe más allá del día. Y cuando las sombras separen las luces,
estaré susurrando tu nombre,
a lo lejos, en mi escondite,
en mi helada nada... Allí, donde tu eres mía...