Hace justamente diez años que murió cuando apenas tenía 15 años. Una agresiva leucemia se llevó a Carlo Acutis, un joven de Milán (Italia) que tenía un amor tal por la Eucaristía que no faltó ni un solo día a misa y a la adoración al Santísimo desde que hizo su primera comunión.
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Él siempre quiso tener cerca a Jesucristo. Le vio en la enfermedad, en la gente de su entorno, en los necesitados pero sobre todo en ese amor desmesurado a la Eucaristía
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Los frutos de su vida están haciendo mucho bien a miles de personas en la actualidad.
Queridos míos, amémonos los unos a los otros,
porque el amor viene de Dios.
Todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios.
El que no ama no ha conocido a Dios:
pues Dios es Amor...
Si tal fue el Amor de Dios,
también nosotros debemos amarnos mutuamente.
Nadie nunca ha visto a Dios,
pero si nos amamos unos a otros,
Dios permanece en nosotros...
Entonces amémonos nosotros,
ya que él nos amó primero.
El que dice: “yo amo a Dios”, pero odia a su hermano,
es un mentiroso.
¿Cómo puede amar a Dios, a quien no ve,
y no amar a su hermano, a quien ve?
Él mismo nos ordenó:
El que ame a Dios, ame también a su hermano.
(1 Jn 4,7-8.11-12.19-21)
El que ama al Padre,
ama también a todos los hijos de ese Padre.
(1 Jn 5,1)
El que no ama permanece en la muerte.
El que odia a su hermano, es un asesino,
y, como lo saben ustedes,
en el asesino no permanece la Vida Eterna.
Jesucristo sacrificó su vida por nosotros
y en esto hemos conocido el Amor;
así también nosotros debemos dar la vida por nuestros hermanos.
Cuando alguien goza de las riquezas de este mundo,
y viendo a su hermano en apuros le cierra su corazón,
¿cómo permanecerá el Amor de Dios en él?
Hijitos, no amemos con puras palabras y de labios afuera,
sino verdaderamente y con obras.
(1 Jn 3,15-1
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Ustedes saben que los jefes de las naciones
se portan como dueños de ellas
y que los poderoso hacen sentir su autoridad.
Entre ustedes no ha de ser así, sino al contrario:
el que aspire a ser más que los demás,
se hará servidor de todos.
Y el que quiere ser el primero,
debe hacerse esclavo de los demás.
A imitación del Hijo del Hombre,
que no vino para que lo sirvan,
sino para servir y para dar su vida
como precio por la salvación de todos.
(Mt 20,25-2.
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http://www.mercaba.org/Cristologia/X...aravias_06.htm
dparaquediospermiteelmalsipuede
quehaga
algo
sino puede no existe
e dilema de epicuro es el siguiente
si dios puede y quiere
¿porque aun no ha desaparecidoel mal la pobreza y los desastres que nos amedrentan dia y noche
desde la ida de lujuria propiciada por organos que e puso me parece injusta la condenacion etwerna por ello
lo mismo con lo demas
si dios no puede encontrar la forma de hacer esto bien
no existe o es inutil ala hora de usar su omnipotencia mezclado con s u omnisciencia
Tantas palabras por sentir por un muerto,,,,,dios es un ser vivo, y nunca morira y nosotros tampoco
Ronan, imaginémonos un Dios que nos quita la enfermedad, que nos da los alimentos en forma de Maná, todos los chicos somos morenos, de ojos verdes, de 2 metros de altura, delgados, con una dentadura perfecta con bastante pelo en la cabeza, etc... y las chicas morenas de ojos marrones de 1,90 de estatura, delgadas, cariñosas, buenas madres y compañeras, etc... todo el mundo así, que no hiciera falta las casas porque Dios nos da la temperatura necesaria en el Planeta, que no hubiera plagas, etc...
Y siempre así.
Ya nos dice la Biblia lo que pasaría con el Maná, pero bueno a nosotros no nos pasaría porque Dios no permitiría que eso pasara. En fin, como ves, un mundo idílico, ¿para qué íbamos a ir al cielo si nos conformamos con lo imperfecto, la finitud, y desechamos la Perfección Suma, la infinitud?
Pues eso, eso que tú quieres es pecado, y de los gordos.
¿Cómo desarrollaríamos estas virtudes, por ejemplo: Constancia. Control. Coraje. Decisión. Diligencia. Esfuerzo. Fortaleza. Hábito. Justicia. Madurez. Mortificación. Obediencia. Orden. Penitencia. Perseverancia. Responsabilidad. Sacrificio. Voluntad.?
Imposible ¿verdad? porque estaríamos a merced de nuestros caprichos. Y Dios solo existiría para contentarnos, a nuestros pies.
Repito lo que tú deseas es un pecado y de los gordos. El corazón del hombre busca lo infinito y no se contenta con lo imperfecto.
¿Entiendes ahora? Dios desea que estemos con él, nos ha indicado el Camino porque con menos el corazón del hombre jamás será saciado. Y la muerte es el último paso para estar con él, pero debemos esforzarnos en esta vida y poner toda la confianza en él para no perdernos.
Jesús habla al corazón, transforma el corazón de las personas, no su cuenta bancaria. Tener nuestro tesoro en el cielo, porque allí donde esté nuestro tesoro allí está nuestro corazón.
Última edición por Ciro; 17/12/2016 a las 07:25
Sigan comentando, pero dentro del tema.
Última edición por Emeric; 22/12/2016 a las 13:21
¿ Qué te parece, Intelectito ?
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