Cuba en los XXX Juegos Olímpicos de Londres-2012, de nuevo en el liderazgo de América Latina y el Caribe.
Se habló de que al deporte cubano le esperaba unos mediocres Juegos Olímpicos, con una delegación menor a la de la anterior edición en Beijing, pero pese a los pitonozos envidiosos, Cuba ganó 14 medallas (cinco de oro, tres de plata y seis de bronce).
Cuba obtuvo en Londres menos medallas que en Pekín, pero fueron de mayor calidad. Frente a los dos oros de China, el país caribeño sumó cinco en el Reino Unido, lo que lo ubica en el puesto 15 del medallero mundial (entre 204 delegaciones) y el primer lugar en latinoamerica.
En el lugar 15 entre 204 delegaciones, por encima de Jamaica con Usain Bolt y una banda de excelentes corredores en los dos sexos, y muy por delante de Brasil, Colombia, México, Argentina y República Dominicana, por mencionar algunos.
Cuba viajó a Londres con 110 deportistas, menos de los que llevó a Pekín en 2008, pero volvió al podio en deportes como las pesas y se incorporó a otros como el tiro. Además, recolectó medallas en judo, taekwondo y lucha.
El avance del país caribeño sobre Brasil confirma los datos observados en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011, donde los cubanos aguantaron la presión de los sudamericanos y terminaron en el medallero sólo por detrás de Estados Unidos.
Más allá de consideraciones financieras e intereses diversos, el mérito de países pequeños como Cuba, República Dominicana y varias islas del Caribe anglófono, trasciende porque remarca las cualidades y capacidad de entrega de sus deportistas.
“A las grandes potencias les toca ocupar los puestos de arriba. La noticia es que estemos ahí países como el nuestro, con muchos menos recursos y el regalito del bloqueo estadounidense”.
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