"""Mujeres cabalgando en el viento""""...Novela por Caracolamarina

[Minelis]

Creo que hoy podré leer algo. Gracias Caracola por tenerme presente. Ya di una vueltita por otros foros que me interesan menos, ahora me deleito en este.
Un placer enorme volver a leerlos.
Avi, te extraño.

[Caracolamarina]

Gracias Minelis....y para los lectores que decían siempre A tutifruti y Avicarlos y...Neftis...
Un saludito para uds y para"" los silenciosos""" que a lo mejor alguno viene a leer esta ...novela por entregas.
Buenas ondas para todos ...

[Caracolamarina]

Cuando la Rosalía conoció al Peuco en unos de esos bailes del día 18 de Septiembre en Playa Ancha, en el Deportivo Playa Ancha. Nunca imaginó, que cuando él la sacó a bailar un lento, con la voz hermosa de Los Plateros ( The Platters ) él sería el hombre de su vida.

Ella, era muy joven y sus tías solamente la dejaban ir a bailar hasta las 10 de la noche, acompañada de sus primos, que la cuidaban como """ huesito santo"" ya que, en esos años, la virginidad de una mujer, era un bien muy preciado, para poder casarse con alguien, que la pretendiera.

Pero El Peuco era de esos hombre, que ni pensaban casarse ni menos formar una familia.
Ambos introvertidos bailaron en silencio la balada... Only You, ante la mirada atenta de sus primos.

[Caracolamarina]

Sus primos le dijeron bromas, cuando el la dejó en la mesa del salón de baile y con una sonrisa le dijo:
¿Bailaremos el próximo lento ?
Ella asintió y al pasar unos minutos, él volvió a sacarla a bailar.

Quizás, la Rosalía en ese instante, sintió el aliento a cigarrillo y a colonia del hombre que la llevaba abrazada, por la pista de baile, quizás al sentir la mano firme en su cintura se estremeció o quizás no sintió nada de eso, pero igual ese hombre grande y fornido la dejó impactada.

La Rosalía no podía saber que de alguna forma su vida estaría unida a ese hombre que la miraba medio socarrón al verla tan tímida y sonrojada cuando el le decía algo. Algo simple como de donde era, y si vendría el otro día de celebraciones patrias al Deportivo.

El no estaba acostumbrado a tanto silencio en una mujer. Porque, generalmente él era el silencioso y la mujer era la que hablaba o a veces parloteaba. Pero esta, que ahora estaba en sus brazos, bailando una melodía lenta, de unos cantantes norteamericanos de moda, era silenciosa al extremo. Eso lo ponía un poco nervioso, pero a su vez le pasaba, que deseaba tenerla más tiempo en sus brazos.

Así pasaron la noche bailando y casi comunicándose con monosilabas de parte de ella.

El le pidió si podía llamarla por teléfono a su casa, ella toda nerviosa le dijo unos números que él apenas alcanzó a memorizar.

[Caracolamarina]

Vaya a saber si fue lo predestinado para ella.
Pero sin querer, verlo al hombre que casi la había cautivado en el baile del DPA. Lo encontró caminando por la calle Colón, viniendo de hacer una prueba de sus vestidos a una clienta.

Porque Rosalía se ganaba el dinero como modista a domicilio a pesar de sus cortos años.
Ambos se quedaron mirando estupefactos por la sorpresa ella se sonrojó, y él la miró embobado...


Sn embargo el reaccionó y la saludo efusivamente apretandole las manos entre las de él que eran enormes.
Ella le dijo:
¡¡¡Que casualidad!!

El le dijo entonces...medio torpe en el hablar...
Bue..Ud no me llamó por eso quizás nos hemos encontrado...
Ella sonrió a su vez.

[Caracolamarina]

[Caracolamarina]

Podríamos ir a conversar un rato al Parque Italia le dice él, mirándola para ver la reacción de ella...
La Rosalía asiente, un poco avergonzada, de que a la primera invitación de él, ella diga que si.

Pero le gusta este hombre, que tiene cara de buena persona y además, cuando se conocieron, ella había quedado de llamarlo y no lo hizo. Le da verguenza reconocer, que perdió el papelito, en donde había anotado el número del telefono de él.

Así ambos se encaminan al parque Italia que les queda cerca...Los árboles frondosos y la quietud entre la vegetación del lugar les hará mejorar el primer encuentro casual.
Ambos caminan hacia el lugar callados. El porque no sabe como abordar una conversación interesante para ella y ella por timidez.

A esa hora casi todos los asientos están desocupados. Eligen uno y ambos se miran de nuevo como para volver al primer momento de su encuentro.

¿ Se acordó un poco de mi ?

Le dice él, mirándola fijamente a los ojos.

Ella se sonroja, y casi con verguenza le contesta...

Si...Mucho me acordé de Ud.

Antonio entonces se pone contento y desde ahí parece que la lengua se le suelta, ya que, le empieza a contar parte de su vida. Su trabajo, donde vive con su hermano mayor, ( sus padres fallecieron hace poco, pero ese tema todavía no quiere contarlo )
Ella escucha ensimismada, en los detalles que le da él.

La brisa de Valparaíso a medio día los acompaña en el parque...y ellos no se dan cuenta del paso del tiempo.

El Peuco, por primera vez, siente que de alguna manera sabe que esta mujer, será su mujer...Su esposa.

[Caracolamarina]

Antonio le comenta que....Están sentados cerca del símbolo del Parque Italia los dos niños con la ""madre loba"" que simboliza toda una historia del Parque Italia.

[Caracolamarina]

Ese día fue especial, para ambos.

Ella nunca se esperó encontrarlo en la calle y él menos que menos justamente venir a tener este encuentro con la hermosa mujer que tanto le había hecho soñar este último tiempo...

El amor, no estaba presente, en ninguno de los dos.

Sus vidas eran tan diferentes
.
Cada uno, tenía una profesión, que los mantenía en diferentes lugares, muy alejados uno del otro.

Ella vivía en Playa Ancha, en un caserón, junto a sus primos y tíos.

Sus padres, muy viejitos, porque se habían casado muy grandes, estaban al cuidado de su hermana casada con el tío Manuel y sus tres hijos ya mayores, que la Rosalía. Vivían todos en el inmenso caserón, de la Avenida Playa Ancha, la principal del barrio.

La tía Herminia, la había hecho estudiar Corte y Confección, carrera de tres años en la Escuela Técnica femenina, que quedaba en la Calle Independencia de Valparaíso.

Herminia, siempre le decía:

¡¡Una buena modista siempre tendrá trabajo!!

Por eso, la Rosalía estaba tan contenta, de que su tía, le había inculcado esto de estudiar Modas...

Mientras que, Antonio, no tuvo la suerte de tener familia que lo ayudara, nadie en la familia se ocupaba de los estudios, tan necesarios para la vida.


Cuando era chico, su gran afición era ir a mirar los pájaros al monte, que quedaba detrás del Cerro Florida, en el que había un bosque de pinos, eucaliptus, álamos y muchos arbustos con flores. Ideal, para que los pájaros de la región, hicieran sus nidos.

[Caracolamarina]

Antonio de alguna manera conseguía que sus amigos lo acompañaran y cuando veía a un pájaro predador de los nidos de las aves más pequeñas él los espantaba.
Quizás sus compañeros de aventuras cuando veían que él defendía a los pajaritos pequeños, del ave de rapiña, que anda por esos lados del monte, ""lo bautizaron"" con el nombre de dicha ave""" El Peuco""".

Así quedo, con el sobrenombre hasta adulto; a él no le molestaba, porque era un recuerdo de su niñez libre y aventurera, por los andurriales cerca de la Naturaleza y de las aves.