Cuando mi día final llegue,
Queridos míos,
No intenten prolongar mi vida por medio de máquinas,
Si esa es mi última hora, permitan que se cumpla y déjenme partir.
Pero eso sí…
Nunca digan que me vieron en mi lecho de Muerte,
Pues si hacen lo que les voy a pedir, realmente será:
Mi Lecho de Vida.
Esto quiero que hagan:
Den mis ojos al desdichado que nunca ha contemplado
el amanecer a orillas del mar o el amor en la mirada de una mujer.
Mi corazón dénselo a alguna persona a quien el suyo solo le haya dado sufrimiento.
Den mis riñones al enfermo que deba recurrir día a día a una máquina para lograr
vivir tan solo un día más.
Reúnan todos mis huesos, músculos, fibras y tendones y entréguenselos al lisiado
que no conoce correr por la playa esquivando las olas del mar.
Hurguen en mi cerebro, tomen sus células y nervios y hagan que se desarrollen de tal modo que algún día sirvan para que un chico sin habla grite el gol del campeonato, o
que una jovencita sorda pueda oír un Te quiero del elegido de su corazón.
Solamente mi Sangre respetarán, la derramarán toda sobre la tierra,
ella es sagrada y solo pertenece al Autor.
Lo que quede de mi cuerpo, arrójenlo al fuego y las cenizas entréguenselas al Viento,
que él es sabio y sabrá donde llevarlas.
Si algo deben enterrar, que sean mis errores, mis flaquezas y todos mis prejuicios.
Devuélvanle al Diablo mis pecados y por fin…
Dejen que mi Espíritu vuelva a Casa con Dios.
Si hacen todo esto que les pido,
Queridos míos,
Viviré Eternamente.
[URL]http://www.incucai.gov.ar/home.do[/URL][URL="http://www.incucai.gov.ar/home.do"][/URL]
Marcadores