Tanto tiempo mis queridos amigos lectores! Me place en regresar por estos lares a compartir con vosotros. A leerlos y tener la dicha indescriptible de que mis letras puedan escapar de la cárcel de mis cuadernos. Cómo siempre, las críticas constructivas siempre son bienvenidas!
Les envío un abrazo y aquí va un cuentito...
Espera vaivén
La penumbra del consultorio ecográfico brillaba en sus ojos, cuando la luz de un monitor impactó en sus pupilas regalándole una primera impresión.
La criatura nadaba placentera, como si no existiese el tiempo y el espacio; Mientras variedades de ojos la miraban sin perturbarla… Y miraban especialmente el agua que almacenaba en su espalda y que, significaba algo peligroso.
Quizás si pudiese hablar les expresaría que no dolía; Por lo menos no dolía más que esa repercusión en su pequeño corazón de la angustia que su madre sentía por su inesperada existencia… _Quisiera ahorrarte un problema mamá….- Pensaría la criatura, que sin explicación alguna se desarrollaba de forma extraña en un vientre duro y frio… Una vez más la angustia estaba presente, y las lágrimas se vertían cual una catarata golpea una superficie salpicando una lluvia helada en su derredor; y esa lluvia se transformaba en tormenta y esa tormenta en multitud de ruidos y nubarrones negros que se paseaban como reflejo de una triste espera. Espera que supo transformarse en cárcel sin barrotes y que tuvo vigilantes que vistiendo de civiles husmeaban cada rincón de la situación, buscando una lengua extensa para darle un tirón y anudar así, montón de chismes más que la imaginación sería capaz de producir.
_Yo no tengo idea sobre qué puedo a hacer. – Dijo la preocupada futura mamá. Recibiendo de consuelo que si creía oportuno podía abortar. Pero estando en contra de esto, decidió no hacerlo y esperar… Sólo esperar que la naturaleza decidiera la vida o la muerte, la salud o la enfermedad de esa personita que crecía en su vientre.
Las lágrimas le recorrían el rostro mientras la luz del sol vespertino entibiaba su cuerpo helado y tembloroso que no era otra cosa que una urna, un envase contenedor de una vida que no le pertenecía y que no amaba; Mientras los latidos suaves y acelerados del pequeño personaje se fusionaban con los suyos y cada movimiento lo volcaba por las aguas pacíficas de la soledad y el silencio manteniéndolo en una danza eterna de esperanza, vacío y un extraño amor…
Sus manitos y sus pies fueron interpretando día a día un ritmo distinto y al desperezarse como al jugar daban clara señal de su activa presencia y su necesidad de vivir, de estar, de crecer, de ser… Y así, poquito a poco, de forma sutil y acelerada; Aquella rareza de enfermedad se mezcló con la nada y salió volando de la mano de una pesadilla que se perdió en el tiempo y que dejó atrás el espacio… ¡Qué maravilla de noticia! ¡Qué gran excusa para la alegría! No crecía en su vientre un vegetal, un poroto con latidos o una papa con extremidades convincentes. Era una personita, que ahora, y por fin estaba sana y llena de estimas…
_Ya se acerca el tiempo que este sujetito vea la luz.- Le aclaró su médica y un miedo vestido de nervios la recubrió por completo en la tranquilidad de ese consultorio amarillo con detalles macumbas. _Cómo te sentís?.- _Estoy un poco nerviosa… No sé. No me imagino cómo será… .- _Lo descubrirás después de haberlo experimentado. Es la mejor etapa de una mujer el ser mamá…
Temblaba su cuerpo tendido sobre una camilla rodeada de reflectores y médicos escondidos tras sus ambos y barbijos… No sentía sus piernas y una sensación de sueño la mantenía en un estado de leve sinsentido. Trepó entonces por espacios infinitos, imaginando mañanas, crepúsculos y atardeceres llenos de magia, de color y de grises tonos a veces… No quería la vida de una vaca multicolor; Prefería en cambio, ser un águila, una serpiente o sencillamente una flor silvestre… Pero no una vaca multicolor. Y pensó, que si algún día, sus pensamientos, ideas o si algún día las danzantes letras que adicionaban en su cabeza detenían su ritmo, su música, su afición; Sería mejor la muerte que la agonía, que el impulso prohibido de continuar en la búsqueda de la educación, el estudio y la verdad…
Un llanto la despertó y un pequeño ser con forma retorcida y cabeza extraña fue acercado a su rostro, al cual con su saliva marcó mientras sus manitas tomaban el dedo de su madre y se aprisionaban una a la otra en expresión de rabia y malestar.
_ ¡Estaba cómoda allí! ¿Por qué me sacan? Habrá pensado la criatura. Mientras su madre, encambio, pensaba en ese fuerte temperamento que en apenas segundos de salir de su vientre demostró con vehemencia y convicción. No son personas de las sombras ni de las orillas las que son capaces de hacerse oír, ver y respetar.
Y la niña, a minutos de nacida, ya había obtenido lo que quería… Porque al fin de todo, se quedaría con su madre. ¿Qué más podría logar tan delicada presencia, tan tierna existencia?
Copyright. Magda LaCroszze (yo)
03.29 16/6/12 La Rioja-Argentina
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