He conocido a montones de cristopaulinos (católicos pero, sobre todo, protestantes) que están a favor del uso de contraceptivos para limitar el número de hij@s que pueden tener.
Esos creyentes, o no se dan cuenta, (o se dan cuenta, pero no les importa un comino) de que la voluntad de su Dios claramente expresada por El mismo a la primera pareja fue de fructificar, de multiplicarse y de llenar la tierra, Gén. 1:28; no de limitar los nacimientos.
Nada de "planning familiar".
Pero, ellos, lo más tranquilamente del mundo, pisotean esa orden divina, y recurren a diversos métodos contraceptivos, obstaculizando, así, la obra de su propio Dios en la Tierra.
¡ Que incoherentes son !
Marcadores