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LA VIDA NUEVA[/SIZE][SIZE=3][/SIZE][SIZE=3]La conversión de una persona, comienza en tomar una decision, de vivir para con las promezas que sobre pasan esta vida, y esto es para siempre y por siempre. Porque ahora tenemos en quien refugiarnos, nuestro Salvador, Hijo de Dios. Claro está que la vida se puede reclamar siempre y cuando uno mismo la quiera, pero eso sería volver a cambiar la vida nueva por la antigua. Pero una vez que se reclama la vida antigua, el refugio que habíamos escogido para nuestras vidas, es muy difícil de volver lo a adquirir, primeramente porque todo esto ha costado precio de sangre. Ya sea que en la conversión hubo esa elección en requerir la vida nueva que se vive en Jesús, vuelve a tomar el mismo proceso el cuál es el arrepentimiento.[/SIZE][SIZE=3][/SIZE][SIZE=3]En la conversión de la persona Dios derrama su poder, y lo maravilloso es que Dios comienza a trabajar con las personas individualmente así como también en muchos casos que Dios lo hace en unidad, con individuos que están dispuestos a hacer no solamente para ellos sino también para los demás. Los hijos de Dios reciben la vida nueva a través del Hijo de Dios, nuestro Señor Jesucristo cumple parte de esa promesa también en un sello que a través del Espíritu Santo, somos dignos de ser llamados a través del Espíritu Santo, hijos de Dios. [/SIZE][SIZE=3][/SIZE][SIZE=3]Las tragedias que han surgido a través del tiempo y las edades otros le llamaríamos las dispensaciónes. Estas tragedias por ende han venido cambiando su manera de expresarlas, pero hasta donde hemos conocido es que todo lo que está fuera de la voluntad de Dios es pecado, así como también transgresión, otros tratamos de buscar la palabra adecuada para no hacer sentir mal a los demás, otra referencia que sería; la maldad, iniquidad, mentira y así sucesivamente podríamos seguir escalando hasta encontrar lo que se ha perdido. [/SIZE][SIZE=3][/SIZE][SIZE=3]Todo lo que cohenciden con el despliegue de nuestros fracasos muchas veces provienen por las malas acciones, lo que nosotros le llamamos frutos y por lo que decidimos convertir lo dicho en un hecho. Porque del corazón habla la boca y la boca habla del corazón. Y nuestra salvación o condenación está a un pie de la letra. Muchas veces aquí es donde comienzan nuestros fracasos, en las decisiones y acciones que tomamos. Pero aún hay tiempo para el próximo paso. Amen.
VIDENTE.DADDY
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