Príncipe siniestro
Príncipe siniestro
Vuelan caricias heladas
la tibieza de tus manos se pierde,
dulces labios no siento
más tu ausencia es lo único que tengo.
Tras los muros sonidos sordos
tras la escena, un abismo profundo
un alma en pena, una imagen vaga,
llora la misma nostalgia.
Corazón herido
descuido repentino
se abrió la coraza
y entró el bandido.
No puedo olvidarte,
más aún te recuerdo
te empeñas en el arte
de envenenar el corazón enfermo.
Cruel asesino,
príncipe siniestro,
tu sonrisa me conquista
tu actitud me lleva al cementerio.
Bajo tierra mi cuerpo, no yace aunque quiero
mi alma no muere, imposible hacerlo
mi corazón sangra, verdadero vertedero
¿Eres conciente de cómo dejaste a tu amor eterno?
Más sonríes y sigues prendiendo el fuego
el agua no aplaga lo que por ti siento.
Más las lagrimas brotan sin desvelo
y por tu vida clama mi corazón desecho.
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