Asi es, efectivamente es como Ud. señala, y el racismo es una de las partes esenciales del ultranazionalismo.
Bueno, por lo que conocemos hoy, hay discriminación con los sefaradíes y sobre todo con los asquenazy, pero ya sería otro tema y habría que profundizarlo de una manera que desvirtuaría mucho la propuesta inicial.
De todas maneras ningún pueblo por elejido que se diga, esta fuera del sistema de castas, que es una forma de racismo interno y eso se ve claramente, en las divisiones bíblicas, entre el reino del norte y el del sur.
Con decir que alguno de los actuales miembros del partido en el poder en Israel, de ultraderecha, han declarado, abiertamente, ser admiradores de Adolf Hitler, no quedan muchas garantías, sobre la no existencia de un racismo interno.
Última edición por rebelderenegado; 15/04/2010 a las 21:22
Veo que usas el vocablo "racismo" con un sentido lato que, por consiguiente, no es estríctamente racista, pues racismo stricto sensu es afirmar que una raza es mejor y superior a otra, cosa que los norteños y los sureños de Israel no hicieron entre sí.
Lo que sí hubo entre ellos fueron recelos, guerras y discrímenes pero por otras razones; no por pensar que fueran ora superiores, ora inferiores, racial o étnicamente los unos con respecto a los otros dentro de su propia nación, Israel.
Entonces, mejor es no hablar de "racismo", aquí, ya que no procede. Lo que sí es más conforme con lo que leemos en la Biblia es que los israelitas, tanto antes como después de la división del reino de Israel en dos reinos (el del norte, y el del sur), se sentían más y mejores que los que no eran israelitas, por el hecho de haber sido dizque escogidos por su Dios exclusivista, YHVH. Pero ese complejo de superioridad es por motivos religiosos; no raciales o étnicos pues, como ya señalé antes, todos los israelitas, norteños y sureños, estaban genéticamente emparentados con los pueblos vecinos como los moabitas, los amonitas, los edomitas, los madianitas. Por lo tanto, los israelitas no podían pensar que eran más y mejores en lo racial o étnico que esos pueblos hermanos . Espero que eso haya quedado bien claro.
Saludos.
Conviene puntualizar también que el propio Moisés se casó con una mujer que NO era hebrea.
En efecto, Séfora era una cusita oriunda de Madián, Nms. 12:2. Y esa unión con una extranjera le desagradó mucho a María, la hermana de Moisés y Aarón. Y María murmuró en contra de su cuñada, razón por la cual contrajo lepra. Que conste.
Que raro, no han posteado nada, ningun teista o seguidor de las enseñanzas biblicas, para defender lo aqui expuesto.
Ya se, van a decir lo que siempre dicen, que en ese entonces, asi tenia que ser, por la naturaleza de las circunstancias.
Dios me perdone por ser ateo!
Tambien podria entrar a exponer su punto de vista el Sr. Punzon, o nuestros compañeros Watchtowers.
Dios me perdone por ser ateo!
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