Si para ver las obras hay que usar esos ojos raros, es porque las obras no han llegado hasta nuestros días. Las pirámides, por ejemplo, si llegaron, pero de Cristo ni un manuscrito. Hay un rejunte de relatos contradictorios lleno de errores, matemáticos hitóricos, geográficos y moralmente deplorables, nada más.
Y como sus seguidores actuales no tienen la fe suficiente, las obras prometidas por Jesus han cesado. (o fueron varias promesas falsa)
Saludos
Marcadores