NATURALEZA, ONTOGENIA Y DURACIÓN DE LOS FENÓMENOS

Todos los cambios, los fenómenos, los hechos y los eventos tienen una naturaleza, una ontogenia y una duración. Los cambios son la mudanza o dejación de una situación por otra. Los fenómenos son cambios con cualidades características. Los hechos son los fenómenos de carácter social, y los eventos son los fenómenos o hechos imprevistos.

La EXISTENCIA es el estado de los fenómenos de estar ocurriendo continuamente en el espacio. La NATURALEZA es la manera en como se producen los fenómenos. La ONTOGENIA es la procedencia o fuente de estos, y la DURACIÓN es el periodo de existencia de los fenómenos en el cual atraviesan por una serie de fases o instantes sucesivos. La medida de la duración es el TIEMPO.

La ontogenia puede ser un objeto, un cuerpo o un lugar especifico. La ontogenia le proporciona unidad y consistencia a los fenómenos. La UNIDAD es la propiedad de todo ser, en virtud de la cual no puede dividirse sin que su esencia se destruya o altere.

La NATURALEZA DEL TIEMPO es la sucesión continua de instantes. Un instante es una fase o un punto determinado de la duración. La ontogenia del tiempo son todos los fenómenos. La idea de viajar en el tiempo es como pretender que el sonido se propague en el vacío, o que el corazón digiera los alimentos o que al arrojar un gato desde cierta altura este comience a volar.

VEAMOS LA ONTOGENIA DE ALGUNOS FENÓMENOS:

- El segundo: Reloj de cuarzo o de péndulo.
- Los días, los años y las estaciones: La Tierra y el Sol.
- El sonido X: Automóvil X.
- El sonido F: Orquesta F.
- La canción R: Artista R.
- La luz Y: Bombilla Y.
- La luz S: El Sol.
- La corriente L: Generador L.
- El fuego H: Estufa H.
- El calor P: El Sol.
- El humo D: Fogata D.
- El frío C: Aparato C
- La lluvia G: Territorio G.
- La tormenta J: Mar J o Territorio J
- La fuerza K: Persona K.
- La fuerza M: Caballo M.
- La conferencia Q: Salón Q del Hotel Q.
- El matrimonio B: Oficialia B
- El asalto N: Banco N
- El cariño T: Persona T.
- El tiempo: Todos los fenómenos.

Por Elvis Sibilia