Resulta que ahora Tony Blair, el ex premier de Inglaterra es amigo, pata, causa, brother de Barack Obama. "Quiero agradecer a mi muy buen amigo Tony Blair por venir hoy, alguien que lo hizo primero y tal vez mejor que yo algún día. El ha sido un ejemplo para muchas personas alrededor del mundo sobre qué se puede lograr a partir de un liderazgo dedicado. Y nosotros le estamos agradecidos", afirmó Obama. Lo último... que no faltaba.

Este señor, que durante todaaaaaaaaaaa su vida y hasta que dejó el cargo de primer ministro británico era protestante ahora, o mejor, hace casi dos años es católico. Ósea renunció a sus privilegios luteranos para ser hincha y apóstol incipiente de los santos vaticanos. Y quienes me conocen saben que eso me irrita.

Y me irrita pues soy católico desde que nací. Y me irrita porque sé que debe ser una artimaña más de este sujeto que no tuvo reparos para invadir junto a el asno Aznar y el tío Bush a los pobres irakíes, cuyo único pecado era tener reservas ingestes y oprobiosas de petróleo.

Pero también me da risa. Y me da risa porque hay una tira y retahíla de tontos que caen en sus manos. Promueve-me perece eso bien- una cadena de oración por la paz mundial y la unión de todas las religiones, pero esto es sólo la forma. Lo que es despreciable (presumo que debe tener un asunto mayor en esto, ergo el fondo) es el hecho de hacerlo cuando ya se quemó como político.

Primero premier, luego invasor, siempre protestante, ahora católico. De yapa filántropo advenedizo y orador conspicuo. De verdad me aterra pensar qué nuevo artilugio saldrá de su sombrero. Y pensar que asumí que Obama era más centrado. También me quemé.