Muertos, enterrados…
(Mi tumba tú tormento…)
Si he de morir cuando me toquen tus labios,
Moriré con gusto y complacencia;
Si he de sufrir por tenerte conmigo,
Cumpliré mi penitencia,
Si me vuelvo estoica,
No tengas miedo es solo apariencia;
Si derramo lágrimas es por insolencia,
Si me tienes a tu lado
Te apuesto que ni cuenta tú te has dado,
Duele tanto amarte,
Tanto sacrificio a tus pies acomodado,
Tanta angustia,
Besos, caricias y muertes ficticias;
Orgasmos convertidos en espasmos;
Dolor cuando te alejas de mi lado,
Aun sobre todo, mi cuerpo
Lleno de lodo te busca.
Mi corazón pesa y se me va de lado,
Por sobre todas las cosas,
Suplicare que regreses,
Constantemente, como oración;
Aunque me condene para siempre
A la caja oblonga que está en mi cuarto;
Por el tiempo insuficiente que permaneces a mi lado,
Guardare, tú olor ,mi costado, tus caricias
y nuestros cuerpos amarrados,
¡La desgracia será justicia!
¡Mi corazón será alimento!
¡Mi sangre saciara tú sed!
¡Mi cuerpo será tu templo!
Y mi tumba para siempre tú tormento…
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