breve historia personal

[jesus monsivais]

A veces pienso que todo es un sueño, pero no, ahí esta mi historia,

Desde que tengo razón he sido una persona solitaria y falto de afecto, la primera imagen que tuve fue a los 5 años cuando fui por primera vez ala primaria, era una escuela muy humilde, me senté al lado de una acequia y voltee hacia arriba mirando el cielo y me senti solo en el mundo,

Mi familia tuvo que ver mucho con mis sentimientos, mi papa fue un militar y nunca hubo comunicación entre el y yo, estaba acostumbrado a vernos solo como soldados y dar ordenes, mi mama fue una persona muy sumisa en su matrimonio, pues mi papa le hizo el favor en casarse con ella, porque estaba esperando una hija de un novio que la abandono, mi madre siempre fue una persona llena de proyectos e ilusiones, los cuales mi padre se encargo de extinguirlos.

Durante casi toda la primaria la pase en Veracruz, cambiando de casa cada año, apenas empezaba a hacer algún amigo y ya tenia que despedirme de el, en Veracruz se ven las cosas de diferente manera, esta prohibido revolver niños con niñas en la primaria, en promedio se entra a los 9 o 10 años de edad, por tanto yo de 6, en primero, era un bebe para todos

No existía la comunicación con mis compañeros, mucho menos con niñas, en esa ciudad es muy difícil sobrevivir, entre los adultos no existe el respeto, un simple saludo afectuoso se da mentándose la madre, y si el tono no es el correcto era motivo de buenos pleitos a golpes, todo mundo esta a la defensiva, la confianza, cero, ni en sus familiares confían, En estos lugares si tienes oportunidad de aprovecharte de un hermano, lo haces sin miramientos.

Un día cuando tenia dos meses en la secundaria, la cual en Veracruz era lo único que existía después de la primaria, pues la prepa era solo para los ricos, me di cuenta que me acostumbre a leer asiduamente, pues haciendo las tareas empezaba ala 1 y me daban las diez sin terminar, era extremadamente exigente la escuela, de buenas a primeras me dicen nos regresamos a Monterrey.

Al llegar fue un shok, tenia yo un lenguaje tan insultante que todos me odiaban, desconfiaba de todo, hablar con niñas era imposible. Me refugie en las bibliotecas por años, solo ahí me sentía comprendido, lo menos peor era que mi nivel como alumno superaba a cualquiera.

Entrando a segundo año, entre a la estudiantina, me gustaba una muchacha preciosa, todavía recuerdo su sonrisa, me adentre en la música, en los recreos jugaba solo en el piano de la escuela. Un buen día mi padre hablo conmigo y me dijo, cuando yo tenia menos que tu ya me valía por mí mismo, es tiempo que le busques por tu cuenta, tenia solo 13 años.



A partir de ese momento no tenia comida ropa escuela ni nada, solo techo. Se me prendió el foco y empecé a visitar a mis tíos para mendigar comida, todos los días para poder comer frijoles y huevo tenia que caminar unos 15 kilómetros diarios de ida y de vuelta, imagínense mis zapatos, mi tía se compadeció de mí y me regalo unos zapatos de mi tío, 3 números mas grandes. esos zapatos me acompañaron 3o 4 años.



De solo recordar no puedo contener las lagrimas, un buen día dios me puso en otro camino, paseando por el centro, al pasar por una ventana, vi a la niña que me gustaba en la secundaria, estaba tocando el piano, le di la vuelta a la vieja casa y vi que era una escuela de música, como pude, le pedi a un maestro de la secundaria que me pagara la inscripción.



Después de ir a comer con algún tío, por las tardes me iba caminando a contemplarla, poco a poco fui aprendiendo música, un compañero me dijo tengo un violín empeñado no le podrías pedir prestado a tu mama para que me ayudes a sacarlo para no perderlo. mas tarde se lo tuve que pagar pues nunca pudo pagarme y me quede con él, todas las tardes me la pasaba jugando con el violín sin saber absolutamente nada, un maestro me dijo oye muchacho todas las tardes te escucho rascarle al violín no te gustaría aprender y le dije que si, bueno solo pídele permiso a tu mama. la buena suerte y dios siempre me acompañaron, teniendo dos semestres con el violín, por casualidad fui a un ensayo de la sinfónica y el director entre jugando me dijo que me invitaba a tocar ahí, empece a ir y fui progresando, el director me animaba mucho, casi lo considero como un padre. cuando llegue a la prepa ya no podía con los ensayos y la escuela iba yo muy mal, le dije al director que me disculpara y le agradecía su apoyo pero tenia que abandonar la música, muy serio me dijo no me venga con eso preséntese con el administrador él le va a decir que hacer, el administrador me dijo me trae dos fotos y su acta de nacimiento, yo solo obedecí no sabia ni para que. al siguiente día me dice aquí esta su primer cheque. es Ud. empleado universitario de planta de tiempo completo. dediquese a la música.

Ese día por fin supe lo que sabia mi primer bistec a la mejicana, con mi propio dinero, tenia 17 años.

pase por muchas ilusiones y desilusiones con las mujeres, pues para que se den una idea de mi ignorancia, aprendí a decir buenos días apenas hasta los 19,es larga mi historia apenas voy comenzando luego se las cuento

[jesus monsivais]

para aquellas personas que leyeron mi larga historia

esta aun no tiene final, el día que concluya, estaré bajo tierra, y espero que a alguien le allá interesado como para escribirle algún modesto epitafio

después de salir apresuradamente de la que fue mi casa por 10 años menos dos días, me refugie en un negocio que estaba por abrir el primer socio con quien empezaría un taller de reparación de computadoras,

había sido tan dura la época que había pasado con mi ex que los recursos económicos se agotaron al extremo, al dejar la casa donde tenia instalado mi negocio, diariamente recibía clientes para repararles sus computadoras,

buena parte del problema fue la invasión de mi negocio a la casa, pues la falta de privacidad para mi ex era motivo de reclamo todos los días, decía que todos mis clientes solo la espiaban para ver que sacaban de ella,

tengo varios amigos que sufren por lo mismo, pues cuando uno empieza este tipo de trabajo, normalmente uno se aviene a cualquier necesidad del cliente, horas inhábiles, de madrugada, fuera de la ciudad, donde sea,

Cuando por fin encuentras donde establecerte, tiene uno que regalar su tiempo a raudales, en casa me daban a veces las dos o tres de la mañana, reparando una maquina urgente, había tanta desunión entre mí ex y yo que decidí ignorarla, solo pensaba en como hacer crecer mi negocio, pues la experiencia del primeritito que tuve me dejo muy deprimido cuando lo perdí,

e tenido por docenas de negocios, pusimos un puesto de tacos mi mama y yo, vendimos demostraciones de porcelana y baratijas por colonias humildes, nos establecimos en un mercado rodante por años vendiendo flores artificiales y mercería, ahí mismo vendimos gorditas y tacos,

ya casado mi ex me exigió que emprendiéramos varios negocios, vendí zapatos de terra entre mis compañeros, vendimos cosméticos entre las compañeras de mi trabajo, vendimos jugos naturales entre los corredores de la avenida las americas, compraba y vendí mercancía de remate del monte de piedad, joyería, instrumentos musicales, herramienta, un día que se me descompuso la lavadora me aventure a aprender como repararla, y le entre a la venta y reparación de lavadoras, ect. ect. Casi lo que se imaginen vendí,

puse un par de veces taller de mecánica con todo y ayudantes, puse un taller de transmisiones, eso de los carros a mi ex le molestaba pues solo los podía atender el fin de semana, y a los clientes distinguidos los citaba a las 8am los domingos, para poder terminar al mediodía y salir a pasear, tengo muy buena reputación de mecánico, pues los mejores clientes que tengo prefieren dejarme su carro del año que a una agencia.

después de incursionar por todos lados hasta en la política, encontré por fin el negocio de mi vida, la computación, como ya les había contado anteriormente esa historia,

al dejar a mi ex ella estaba acostumbrada a recibir de 15 a 20 mil mensuales en gastos, siempre me reclamo que no completaba, y a pesar de las cuentas que le hacia nunca reconoció mi esfuerzo, al irme todo se vino abajo, mis clientes al no saber donde encontrarme se fueron alejando, mi ex después de un par de meses, al ver que seguían buscándome se compadeció de mi y les empezó a dar mi numero celular,

a ella no le fue muy bien que digamos, pues fue cerrándose todas las puertas poco a poco, hasta su padre y su madre le negaron la ayuda, pues sus gastos eran muchos y al no tener yo mi negocio, ni manera de exigirme, tuvo que llegar hasta a mendigar comida entre sus amistades a cambio de ayudarles a arreglar sus casas,

fue algo triste para ella y mi hija, yo esperaba que recapacitara en lo que había perdido por su falta de comprensión, pero no, solo se enalteció su orgullo,

como todavía le falta mucho a este capitulo sé los continuo otro día