Jesús convierte el agua en vino:

El sabor a borrachera y el contraste con la finalidad profunda de los demás milagros de Jesús nos deja atónitos. Parece que en este caso, a Jesús no le importa llevar hasta la más profunda ebriedad a los presentes. ¿Qué explicación hay para este milagro, que por cierto, sólo aparece en este evangelio?

Una pista nos la puede dar la fecha en que se celebraba este milagro en la iglesia católica...6 de enero... la epifanía. Esta fiesta celebra la revelación del poder del Señor.

¿Y entonces? Pues que desde antes que naciera la iglesia, ya se celebraba el 6 de enero otra fiesta, en la cual se celebraba la manifestación de poder de otro dios pagano, con su milagro asociado al vino: eran las festividades de Dioniso, con su milagro tradicional de manifestación que consistía en convertir agua en vino. En otras palabras, en la leyenda de la boda de Caná se revela el poder divino de Jesús, de la misma manera como era narrada la manifestación del poder divino del dios pagano Dioniso. El 6 de enero pasó a ser el día de la manifestación del dios cristiano Jesús, y desplazó al día de la manifestación de Dioniso que hasta ese entonces, se había celebrado el 6 de enero. Dioniso hacía que en su templo en Elis, en el día de su fiesta, tinajas vacías se llenaran de vino y en la isla de Andros fluía de una fuente o en su templo, vino en vez de agua. El milagro de la fiesta de Caná no fue la transformación de agua en vino sino la transformación del dios cristiano en una especie de dios del vino. Como dijo el gran teólogo y exegeta evangélico Rudolf Bultman, en su "El evangelio de Juan": "Sin duda, la historia (de la boda de Caná) fue tomada de una leyenda pagana y transferida a Jesús".
Afortunadamente para los creyentes serios, no se tienen que preocupar por la grosería de Jesús con su madre...este relato, en opinión de la mayoría de los teólogos modernos, es sólo una fábula.