1. los sacrificios eran una señal, no comida para Dios. Eran profesías, para hacer recordar.
2. No tienes que agradecerle nada, solo tienes que aceptar su regalo: creer. Si no lo haces, pues no recibes el regalo. entiendes?
voy a comer y luego para la iglesia, así que probablemente no te responda hoy. aDios, chouu
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