HINANDEGA
Un rayo que cayó a las tres y media de la tarde de este jueves, fulminó a Orlando David Gunera Hernández, de 20 años, y a su sobrino, Norlan Eleazar Llanes Hernández, de 15, en la finca Las Maravillas, ubicada en las faldas del volcán San Cristóbal.
Entre sollozos, Juana Isabel Hernández, hermana de Orlando David y madre de Norlan Eleazar, relató a EL NUEVO DIARIO que éstos se encontraban bajo un árbol esperando que cayera la tarde para trasladar varias reses hacia un sitio cercano a su vivienda, situada en la comarca La Cumbre.
“Llovió muy fuerte y lamentablemente el único rayo mató a mi hermano y a mi muchacho, que diariamente pastoreaban un ganado”, dijo Juana Isabel.
Por su parte, Edgard Moreno, vecino de los fallecidos, dijo que tenían una abertura en la frente, y el rayo les desgarró la faja, sombrero y vestimenta.
Ambos eran miembros de la iglesia Testigos de Jehová, y fueron sepultados a las cinco de la tarde de ayer viernes en el cementerio de Chinandega, en medio de la consternación de familiares y vecinos.
El miércoles 23 de agosto del corriente año, Adagricelda Urey, de 22 años, y su sobrina, Dalia Guadalupe Oviedo Urey, de 12, recogían la ropa que tenían en el tendedero de su humilde vivienda, ubicada en la entrada al Ingenio Monte Rosa S.A., jurisdicción del municipio El Viejo, cuando también fueron fulminadas por un rayo.
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-A LO MEJOR ERA EL RAYO DE JEHOVÁ, ¿NO , JORHTA?-
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