Haciendo El Amor
Tengo un amigo gallego. Se llama Manolo. Hace poco fué a confesarse:
-Me acuso Padre, que he hecho el amor a la góndola y ella se...
-¡Para, para! -le dijo el cura -sé perfectamente como es y es un pecado gravísimo. Tu penitencia serán 100 padres nuestros y 100 aves marias.
La verdad de las cosas, es que el sacerdote no tenía ni idea de que era hacer el amor "a la góndola", pero no quiso pasar como un ignorante y menos ante mi amigo Manolo. Buscó en Internet por todos los sitios de la red, preguntó a las más célebres prostitutas, habló con el cardenal obispo de Venecia, quién ordenó una investigación sin encontrar nada sobre ello. Pasaron los días y no tardó en regresar Manolo al confesionario. -Que me acuso padre que he pecado de nuevo haciendo el amor a la góndola. - Bueno hijo, -contestó el sacerdote que se moría de curiosidad. -Esta vez pasaré por alto la penitencia si me dices detalladamente cómo hace el amor "a la góndola".
-Bueno padre, pues verá usted que me han presentado a una moza, e inmediatamente yo le digo que tiene unos ojos preciosos, un cabello divino, un cuerpo tentador...-¡Idiota! ¡Eso es el amor halagándola! ¿entiendes, burro?
¡¡halagándola!!...
Re: Haciendo El Amor
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