Ausencia
Mis ojos lloran por la distancia,
Pues les falta ver tu trazo,
No ceden a aceptarlo,
Nunca pensé que fueras lo más esencial.
Mis labios se muerden por el día de tu llegada,
Necesitan esa miel que solo los tuyos conservan,
Ásperos como el desierto hasta tu regreso,
Me esperanza la venida del próximo esplendor.
Mis manos sudan por la inquietud de tu vacío,
Ese que va desgastando el interior,
Y de paso la esperanza y razón,
¿No piensas volver amor mío?
Ruego al cielo por paciencia,
No quiero llorar,
Es inevitable,
Tu desaparición va más allá,
Me pones fuera de control,
Voy a la deriva,
Me haces promesas de amor,
Tu retirada a cambiado de rumbo el timón.
Un no por respuesta,
Un adiós inconcluso,
Un corazón roto,
Y tu ausencia sigue en bruto.
Iniciado por alma del mar
Gracias!
No del todo; aunque ha estado a punto de vaciarse por completo, siempre hay alguien que llena el lugar del ausente...
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