[size=4]No es el mismo mandamiento, por varias razones. Te doy la principal:
El "grande" mandamiento de la Torah, comprendido en dos ámbitos, implicaba un amor
al otro, al extranjero, al no israelita, considerando como parámetro o regla el amor de sí mismo ("
como a uno mismo"). "YO" hebreo debía amar al "OTRO" gentil como a mi misma persona, CONSIDERÁNDOME A MÍ MISMO. En cambio, el "mandamiento nuevo" consite en amar
no al otro, sino
al hermano, y ya no como a uno mismo, SINO COMO
JESÚS LES HABÍA AMADO. Al modificarse el
objeto y el
parámetro del amor, no es por
sustitución, sino por
complemento, de manera que el amor está ahora expresado en su forma total. JESUCRISTO ESTÁ COMPLETANDO EL CONCEPTO AL AMPLIARLO DE TAL MODO.
Si se hubiese permanecido sin esta "adición", la Iglesia no tendría comprensión de la dimensión del amor, ni de sus características principales. Sin este mandamiento nuevo, hubiéramos mantenido el mismo nivel mezquino y "ombligocéntrico" de amor, considerándome a mí mismo, y no al perfecto amor de Dios.
Saludos.[/size]
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