Un sueño con Natalie
NataliE
Tuve la dicha y la fortuna de que aparecieras en mi vida a través de un sueño. Justamente le había pedido a Dios que me diera una nueva ilusión para poder desintoxicarme de las emociones provocadas por un amor mal correspondido que he mantenido a lo largo de los últimos años.
Sin motivo alguno apareciste en medio de mis sueños logrando que aún después de despertar, permaneciera en mí una sensación de felicidad y enamoramiento. Después de que apareció tu luz en mi mente, me he vuelto adicto a tu recuerdo, a tu manera de decirme “te amo”, al rose imaginario de tu piel y al destello de tu sonrisa.
Me encanta cuando dices te amo, me emociona tu valentía ante la muerte cuando dices: “Morir no me asusta, pues desde que llegaste a mi vida muero un poco todos los días”.
He tratado de encontrarte en la mirada de otra mujer. Ahora cada tarde espero ansioso vencer el insomnio y reunirme contigo una vez más en ese mundo maravilloso donde todo es posible, en mis sueños.
Me lastima el sonido del despertador en las mañanas, pues con el se anuncia nuestra separación temporal. Me duele tener que dejar de vivir a tu lado y esperar a que mi subconsciente me brinde el lujo, el regalo y la oportunidad de llegar a casa y encontrarte en nuestro regazo, dispuesta a entregar nuestras almas sin medida.
A tu lado ya no tiene cabida mi amigo “el loco solitario”, sólo permanece la esencia del soñador empedernido que anhela tu compañía y comprensión.
Apareciste en mis sueños para desplazar las fantasías fundamentadas en un amor difícil de cargar, difícil de superar y fácil de conservar por costumbre o resignación. Al final de mi sueño sólo me quedó como un recuerdo una fotografía tuya que me alienta a seguir buscándote en un mudo imaginario, donde sólo tenemos cabida tú y yo.
Sé que solo eres una ilusión difícil de alcanzar, pues el arquitecto “Destino” se encargó de trazar senderos diferentes en nuestras vidas, y en este plano designado para nosotros existen reglas y lineamientos difíciles de superar para que te conviertas en mi más grande anhelo… mi realidad.
Sin embargo mi “Mitomanía” persiste por encima de la cordura y me incita a seguirte buscando a través de mis fantasías.
SCB*J
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