Cosas que ojo no vió
Ni oido oyó,
Ni han subido al corazón del hombre
Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
Pero Dios nos las reveló a nosotros POR SU ESPÍRITU;
Porque el Espíritu todo lo escudriña, aún lo profundo de Dios.
Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él?
Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el espíritu de Dios.
Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, PARA QUE SEPAMOS LO QUE DIOS NOS HA CONCEDIDO,
Lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por humana sabiduría, sino CON LAS QUE ENSEÑA EL ESPÍRITU, ACOMODANDO LO ESPIRITUAL A LO ESPIRITUAL.
PERO EL HOMBRE NATURAL NO PERCIBE LAS COSAS QUE SON DEL ESPÍRITU DE DIOS, PORUE PARA ÉL SON LOCURA, Y NO LAS PUEDE ENTENDER, PORQUE SE HAN DE DISCERNIR ESPIRITUALMENTE.
En cambio el espíritu juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie. Porque ¿quién conoció la mente de Señor? ¿Quien le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
Marcadores