El joven rico que pregunto demasiado a jesus

[tomas0403]

En los Evangelios hay un pasaje bastante duro y difícil de entender.
Me refiero a la pregunta que el joven rico hace a Jesús sobre qué hay que hacer para conseguir el Cielo.
Al final de este relato, todo “Acaba como el rosario de la aurora” para los ricos: “Porque es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de Dios”.
No transcribo el pasaje porque se puede leer en:
Mateo 19:16-24
Marcos 10:17-25
Lucas 18:18-25

Incluso a continuación de este pasaje, Jesús dice cosas bastante fuertes que nos afectan a todos. Pero eso es otro tema.
Mi pregunta es: ¿Qué hubiera pasado si el joven rico, a la contestación de Jesús: “…Y si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos”, le hubiese dado las gracias y se hubiera marchado?
Pienso que el relato habría tenido otro final. Posiblemente, lo del camello y la aguja no figuraría en el pasaje.

[doonga]

Pienso que el pasaje no es un mensaje contra la riqueza, sino un mensaje contra el apego.
Resulta más fácil de comprender, para los efectos de la enseñanza, establecer el vínculo riqueza-apego.
Pero también existe el apego a valores (o anti valores), incluso el apego a ciertas creencias, y a otros elementos, que resulta más dificultoso de comprender.

He podido observar, incluso haciendo introspección, que he tenido creencias muy arraigadas, tanto que no me han permitido mirarlas desde otro ángulo.
En esto no me refiero necesariamente a creencias religiosas.

Y como ejemplo de eso, quizá cuántas personas que conozco están tan convencidas de que todo salió de la nada, que no se permiten pensar en otra alternativa.
Y, el caso contrario, muchos que están convencidos que todo es creación de Dios, no se permiten analizar seriamente otras alternativas.

Todo texto "sagrado" tiene múltiples lecturas.
Nos resulta fácil leer lo obvio.

[tomas0403]

Pienso que el pasaje no es un mensaje contra la riqueza, sino un mensaje contra el apego.
Resulta más fácil de comprender, para los efectos de la enseñanza, establecer el vínculo riqueza-apego.
Pero también existe el apego a valores (o anti valores), incluso el apego a ciertas creencias, y a otros elementos, que resulta más dificultoso de comprender.

He podido observar, incluso haciendo introspección, que he tenido creencias muy arraigadas, tanto que no me han permitido mirarlas desde otro ángulo.
En esto no me refiero necesariamente a creencias religiosas.

Y como ejemplo de eso, quizá cuántas personas que conozco están tan convencidas de que todo salió de la nada, que no se permiten pensar en otra alternativa.
Y, el caso contrario, muchos que están convencidos que todo es creación de Dios, no se permiten analizar seriamente otras alternativas.

Todo texto "sagrado" tiene múltiples lecturas.
Nos resulta fácil leer lo obvio.

Te saludo, Doonga.

Estoy de acuerdo en lo que dices. De todas formas, en la continuación del pasaje, se siguen narrando cosas no muy comprensibles.
Intentaré entenderlas.

[tomas0403]

Siguiendo con el tema en cuestión:

Después que Jesús dice su famosa frase: “Porque es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de Dios”, los Evangelios dicen lo siguiente:

MATEO 19
25 Mas sus discípulos, oyendo estas cosas, se asombraron en gran manera, diciendo: ¿Quién, pues, podrá ser salvo?

MARCOS 10
26 Y ellos se asombraban aún más, diciendo entre sí: ¿Y quién podrá salvarse?

LUCAS 18
26 Y los que lo oyeron, dijeron: ¿Quién, pues, podrá ser salvo?

No me cuadra lo que acababa de decir Jesús con la reacción de sus discípulos: “¿Quién, pues, podrá ser salvo?”.
Se supone que ellos eran pobres. Para nada les afectaba lo sentenciado por Jesús. Entonces ¿A cuento de qué esa pregunta?

También podría darse otro caso: Que Jesús dijera una frase más amplia que la que narran los Evangelios. Una frase que abarcara a más gente, además de los ricos.
No veo lógica la inquietud de los discípulos.

[tomas0403]

Desde mi punto de vista, hay dos formas de leer los Evangelios:
Con una fe ciega (te saltas hasta las comas); o con una fe razonada (las comas tienen su importancia).
Digo esto porque creo que es bueno, conforme leemos los Evangelios, ir captando y asimilando lo que se dice en ellos.
No vale la idea general que prevalece sobre lo que quiere decir un determinado pasaje.
Lo importante para cada persona es qué le dice la lectura de ese pasaje.
Yo estoy seguro que cuando Jesús predicaba, a pesar de oír de viva voz lo que decía (repito: de viva voz lo que decía), entre los que le escuchaban, no lo interpretaban de la misma forma.
Resumo: Leer y comprender los Evangelios.
Hago una advertencia: Predicar los Evangelios no te da derecho a la vida eterna. Cumplir los mandamientos es el requisito para alcanzarla. Mateo (23:3) “Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; pero no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, pero no hacen”.
Y ahora continúo con mi pregunta de un post anterior: ¿Por qué se alarmaron los discípulos de Jesús en el asunto de los ricos?
La respuesta esta en Marcos (10:15) y Lucas (18:17); “De cierto os digo que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él”.
Esta frase, tan lapidaria como la de los ricos, convertía la entrada a la vida eterna del tamaño del ojo de una aguja. Y esta frase iba dirigida a todos. Por este motivo, los discípulos se alarmaron.
MATEO (19:25)
“Mas sus discípulos, oyendo estas cosas, se asombraron en gran manera, diciendo: ¿Quién, pues, podrá ser salvo?”
El que planteó el problema, también dio la solución.