Sinuhe
15/12/2001, 13:24
Soneto a la extraviada belleza.
Por Miguel, el ángel (Sinuhe).
La belleza nunca en tus senos desparramados,
el sombrío canto de aquel tu obtuso andar,
tu súbita y desfigurada sonrisa, que a los
toques de la muerte puede igualar.
La caricia jamás deseada, el beso tortuoso,
la sintura desprendida, todo en ti!,
la descarnada figura, el aliento del oso,
todo en ti!, mujer, muere incontinenti!
Y tras tu espalda, la retorcida existencia
que de la desmembrada cara teme,
belleza enmugrecída, vida poca agraciada.
Cascabel desértica, enamorada del viejo
deseo: se consrvará incólume
ese anhelo, la ser una más frente al espejo.
Simplifico en catorce versos tu imagen, Alejadra.
Had horam sepulcri!
Por Miguel, el ángel (Sinuhe).
La belleza nunca en tus senos desparramados,
el sombrío canto de aquel tu obtuso andar,
tu súbita y desfigurada sonrisa, que a los
toques de la muerte puede igualar.
La caricia jamás deseada, el beso tortuoso,
la sintura desprendida, todo en ti!,
la descarnada figura, el aliento del oso,
todo en ti!, mujer, muere incontinenti!
Y tras tu espalda, la retorcida existencia
que de la desmembrada cara teme,
belleza enmugrecída, vida poca agraciada.
Cascabel desértica, enamorada del viejo
deseo: se consrvará incólume
ese anhelo, la ser una más frente al espejo.
Simplifico en catorce versos tu imagen, Alejadra.
Had horam sepulcri!