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Ver la versión completa : Mujeres cabalgando en el viento. 2.-



Caracolamarina
04/08/2018, 11:21
Esta seguna parte de""" Mujeres cabalgando en el viento""", será para que estas historias de féminas sigan estando en lo que son los recuerdos y las memorias, de los que las leen y también para que no queden solamente en los comentarios de la prensa o de los programas de la Tv.

Historias sacadas de la realidad que no rodea, que a veces parece ajena y lejana, y no lo es, muchas veces más cercana de lo que creemos.


Primer capítulo.-


Silvana.


Tiene 12 años y ya el cuerpito pequeño, se anuncia, como si quisiera reventarle las costuras del pantalón, de la falda, de la blusa, o la remera.
Creció de un repente, y quizás nadie se ha dado cuenta, que ella ahora tiene aires de niña mujer, que de a poco, sin que la madre se de cuenta, se pinta un poco los labios, se pone algo de mauillaje de su hermana mayor y hasta el embellecedor de pestaña, ahora le deja las suyas, como si fueran mariposas a punto de volar.

Sí hace un tiempo atrás, se dio cuenta, de que ya no es una niñita desgarbada, ni feucha; como le decían sus primos, los hijos de su tía Maty.

Ahora se mira al espejo y se ve más linda, con las mejilllas arreboladas, y un aire de casi, casi modelo de esas que salen en las revistas que están en las portadas de lo que muestran los kiosocos de las esquinas de su barrio.

Bueno, se dice para sí misma. Lo que hace ahora no es ningún pecado, como le repite tantas veces el amigo de su mamá.
El, que llegó hace un tiempo a su casa, del barrio de Tigre, en que vivián sus otros hermanos y ella. Seis apelotonados en una piecita, que ya se la llevaba el viento. Uno de esos días, en que todos acostados en la sola cama, esperaban a la madre, que había ido a comprar algo de puchero, para hacerles una sopa y así poder capear al hambre y el frío.

Allí estaba, cuando entró él. Un hombre más o menos joven, que les dijo que la madre ya venía. Todos lo miraron asombrados, sin saber que decir.

El hombre les dijo: No se asusten soy el tío Manuel, hermano menor de su madre. Me adelanté a ella, porque la dejé comprando algo más de carne, para que prepare alguna otra cosa de comer.

Todos lo quedaron mirando, extrañados.
Jamás su madre había dicho que tenía un hermano.

Al rato, entremedio de truenos y relámpagos apareció la madre, mojada hasta los huesos y con un paquete enorme en la bolsa de las comprars.

El abrió la puerta, la mujer entró casi de sopetón al piso todo embarrado, de tierra. Las latas del techo parec´çiajn volarse en el viento que sin piedad azotaba el lugar.

Los niños la quedan mirando...Silvana la mayor la interpela:

¿ Cómo nunca nos dijiste, que tenías un hermano?

Ella se queda mirando al hombre, que le hace un gesto cómplice.

No les dije, porque él Manuel es hermano de su padre, no mío.

Los niños se quedan mirandola con cara de:
¡¡¡Que raro!!!

El más chico en edad Leandro que solamente tiene 3 años, le contesta:

¿Por qué mi papá nunca lo trajo a casa?

Manuel se apresura a contestar:

Porque yo estaba de viaje.

Mientras la mujer, pone todos los paquetes ,encima de la mesa y empieza a sacar toda la mercadería, de los envoltorios.

Una semisonrisa, le pone una mueca en la boca...

Piensa. ¿ Por qué no les dirá la verdad?