carlomagno03
04/02/2016, 00:50
Recuerdo eso que solía llamar amor... Sabía que era amor porque la poesía se sentía impregnada en mi piel. A veces quemaba mi piel dejando cicatrices que me llenaban de orgullo y que me hacían sentirme único en el mundo. Me hacía creer que el mundo se detenía por mí cuando dejaba de andar o que el globo terráqueo giraba a la velocidad de mí correr. Hoy me miro en el espejo y las cicatrices se han aclarado tanto que parecen nunca haber existido y el mundo parece haberse olvidado de mi esencia y ahora gira y se detiene con una voluntad perversa. Veo un letargo de un recuerdo que cada día que pasa se desvanece en una agridulce melancolía. Si, eso es el amor para mí, un suspiro en la eternidad, un acto disimulado en la noche, un segundo suicida del tiempo que no se detiene por nada ni por nadie, un instante de la brevedad de la vida…. Gracias a ese recuerdo soy “algo” intangible que en silencio muere y anhela tan solo un rose de una sonrisa. Simplemente ese recuerdo no volverá a escabullirse por la puerta de atrás, no entrará a hurtadillas por la ventana, no entrará por la grieta de la pared revelando las partículas de polvo, no volverá a sorprenderme. Porque así es que recuerdo como me atrapaba, me envolvía en sus delicadas redes de las cuales podemos salir fácilmente; podemos, pero no queremos. Cuando por accidente se rompen esos delicados hilos como desquiciados tratamos de remendar uno a uno ese millón de hilos. A veces logramos reconstruir todo, pero la vida se nos fue arreglando algo que debió de quedarse roto, algo que siempre nos recordará donde se rompió. Claro que ese recuerdo tiene rayos de luz, pero en esta oscuridad necesito luz frente a mis ojos no dentro de mí. Tal vez un poeta lea esto y con su versátil verso o su prosa fuera de practica dirá que la luz que emana en nuestro interior ilumina todo. Yo con desdén y melancolía daré media vuelta mientras saboreo entre mis labios los restos de esa forma de pensar. Y seguiré viendo mis cicatrices desaparecer con mi juventud y con mis ganas de revivir ese recuerdo.