¿Qué es la Fenomenología?

[Asexperia]

¿QUE ES LA FENOMENOLOGIA?

La fenomenología (del griego antiguo φαινόμενoν, 'aparición', 'manifestación' y λογος, 'estudio, tratado') es una forma de filosofía que estudia el mundo respecto a la manifestación.

La fenomenología es una corriente filosófica, muy amplia y diversa, por lo que difícilmente valdrá una sola definición para todas sus vertientes. Sin embargo, es posible caracterizarla como un movimiento filosófico que llama a resolver todos los problemas filosóficos apelando a la experiencia intuitiva o evidente, que es aquella en la que las cosas se muestran de la manera más originaria o patente. Por eso las diferentes vertientes de la fenomenología suelen discutir constantemente sobre qué tipo de experiencia es relevante para la filosofía y sobre cómo acceder a ella. De ahí también que todas ellas se suelan apropiar del lema "¡A las cosas mismas!", que aplica en realidad para todo conocimiento científico en tanto que conocimiento que apela a la experiencia evidente.

De Wikipedia.

[Asexperia]

MI PUNTO DE VISTA

La Fenomenología es el estudio de los fenómenos desde el punto de vista de su esencia y clasificación. Las ciencias estudian los fenómenos desde el punto de vista de sus causas y leyes que rigen su comportamiento.

FENOMENO: es toda apariencia o manifestación material o mental: fenómeno atmosférico, social. Los fenómenos tienen propiedades, que si permiten establecer una unidad constante son magnitudes.

El fenómeno puede ser (en orden de relevancia): un objeto o un cambio, natural o artificial. objetivo o subjetivo, vivo o inerte. El cambio ocurre en el objeto o cuerpo. Solamente el objeto puede ser vivo o inerte.

Ejemplos de fenómenos:
- Arbol: objeto, natural, objetivo, vivo
- Lluvia: cambio, natural, objetivo
- Mesa: objeto, artificial, objetivo, inerte
- Amistad: cambio, natural, subjetivo
- Movimiento: cambio, natural, objetivo
- Felicidad: cambio, natural, subjetivo
- Sonido: cambio, natural, objetivo
- Luz: cambio, natural, objetivo
- Perro: objeto, natural, objetivo, vivo
- Canción: cambio, artificial, objetivo

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[ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO]

La fenomenología estudia los objetos mentales en tanto son objetos mentales, lo que es dado mientras está siendo dado y, por tanto, es "en sí" y, de alguna manera, le pertenece (*); está consigo.

“Fenomenología”, ciertamente, engloba muchos pensadores y modos de pensar distintos. Un psicólogo, un neurocientífico o un oftalmólogo pueden hablar de contenidos fenomenológicos sin atender al preciso sitio donde está su objeto de estudio, no saben bien qué quieren decir con ello; la fenomenología, sin embargo, no es una ciencia empírica, sino de esencias, que está en la cosa misma de la que depende. Cuando Husserl habla de fenomenología piensa en la esencia de la que la cosa obtiene su ser, que no es sino en tanto es eso mismo que está siendo, lo que, propiamente, reivindica.

La fenomenología, para decirlo de manera sencilla, establece una distinción entre el ámbito físico y el mental: vg. hay una silla que sigue un régimen físico, está ahí ocupando un espacio; hay, asimismo, una silla pensada que tiene una existencia al margen de la silla física; el ámbito mental abre un pliegue, una posibilidad que lleva consigo y no estaba en su antecedente físico, ocupa un sitio distinto del espacial; dicho así, la actividad mental no está en el sitio que la precede, no se llega a ella retrospectivamente, por el mismo camino que vino, sino que va por dentro, está en ella (**).

Franz Brentano aprovechó el concepto de "intencionalidad" (***), estar referido a algo, para señalar la especialidad de los estados mentales. No hay exacta reciprocidad entre la determinación física y la mental; lo físico deja de ejercer toda su presión sin lograr llevar a término la existencia mental, no la agota; hay cosas que pueden ser pensadas sin corresponderse con la experiencia física, quedan aparte sin llegar ser contamidadas por ella.

(*) Una de las ventajas del pensar fenomenológico está en que se sitúa en la cosa, en el ámbito donde el pensamiento está siendo cocido. De ahí que sea la reflexión apropiada para ciertas descripciones que, de otra manera, fingirían estar donde no están.

(**) La ocupación del espacio no es sólo un término físico, una fase por la que pase la espacialidad y donde concluya, sino que es una figura elaborada para que el espacio pueda ser pensado; sin esta figura, el espacio no sería pensable, pasaría sin que el pensamiento lo notase; es un matiz reflexivo para que el pensamiento se haga sitio (****). Dicho de otra manera, la fenomenología hace sitio al pensamiento en el espacio para que se desenvuelva en él sin llegar a ahogarse. La actividad fenomenológica prepara el terreno por el que va a andar; no anda a tientas, sobre una nada; en este sentido, es a priori, está dirigida hacia sí.

(***) Intencionalidad, como he dicho, es "estar referido a". Más concretamente, su mayor interés está en la in-existencia intencional, un modo posible de ser sin correspondencia real, un modo que es propio del ámbito mental. No es, sin embargo, un no-existente, sino, mejor visto, algo que todavía no ha logrado entidad, está ahí sin llegar a ser; queda a la espera de estar a la altura, de lograr, dicho en el lenguaje habitual de la fenomenología (*****), cumplimiento.

Brentano fue quien puso los cimientos de lo que se vendría a conocer como “fenomenología” desde una interpretación de Aristóteles y la filosofía medieval en Sobre los múltiples significados del ente según Aristóteles. Todo el que aprecie las joyas de la filosofía debiera conocer sus obras. Su obra más conocida en relación a este tema es Psicología desde el punto de vista empírico.

(****) Este planteamiento pudiera parecer una interpretación fenomenológica de Bergson más que de Brentano. Empero, no sería sino una misma metafísica; en el fondo, son interpretaciones distintas sobre lo mismo.

(*****) La tradición fenomenológica fue liderada por unos pocos autores que usaban un lenguaje muy particular, intelectualmente rico pero terminológicamente pobre; semejante lenguaje no dejaba mucho más que pensar que la atadura que no lograraba fijar y en la que su especulación se perdía.

La fenomenología es una especialidad de la filosofía muy refinada y, en gran medida, poco cercana; vg, cuando la fenomenología habla de "intuición" no se referiere a una intuición inmediata como: "este que soy, soy "yo"", o "esta cosa que está aquí, está ahora mismo presente; está aquí ahora mismo". Esto ha facilitado que la burocracia que la popularizó lo hiciese con terminología impropia (bastarda) y, con demasiada frecuencia, inadecuada; se hablaba de demasiadas cosas que terminaban por no significar nada, un lenguaje estéril con apariencia intimidatoria; no era sino un coladero por el que se dejaban caer términos para los que no había ninguna preparación.

[Asexperia]

Cuando Husserl habla de fenomenología piensa en la esencia de la que la cosa obtiene su ser, que no es sino en tanto es eso mismo que está siendo, lo que, propiamente, reivindica.


La Fenomenología es el estudio de los fenómenos desde el punto de vista de su esencia y clasificación. Las ciencias estudian los fenómenos desde el punto de vista de sus causas y leyes que rigen su comportamiento.


hay, asimismo, una silla pensada que tiene una existencia al margen de la silla física;


hay cosas que pueden ser pensadas sin corresponderse con la experiencia física, quedan aparte sin llegar ser contamidadas por ella.

Hay cosas que son tangibles e inteligibles, pero otras solo pueden ser inteligibles, por ejemplo, los entes matemáticos.

[ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO]

Hay cosas que son tangibles e inteligibles, pero otras solo pueden ser inteligibles, por ejemplo, los entes matemáticos.

Con anterioridad a Investigaciones lógicas, Husserl escribió Filosofía de la aritmética. Uno de los méritos del pensar fenomenológico está en que encara conceptos límite como el de número y los relaciona con su dependencia básica, o como les gusta decir a ellos, “originaria”, que hay un enlace primordial, una materia prima en toda cosa que garantiza que sea lo que es (*).

Esto llevó a que la reflexión “esencial” se centrara en los aspectos apriorísticos, de reafirmación de lo mismo del ser. Pero se dejaba de lado la parte genética por la que la cosa pasaba, en lo que no quedaba fija. Las fases inesenciales, de falta de actividad de lo mismo, eran el lugar ocupado por el sustituto más al acecho, o, lo que es tomado por lo mismo, su opuesto en la actividad pasiva que había en ella, lo que es sustraído.

(*) "Que sea lo que es" puede resultar una expresión absolutamente hueca, como le pudiera parecer a una comprensión del ser que no entrase en detalles, una analítica del mismo que no pusiese en el ser más de lo que, por sí, tuviera consigo; qué sea el ser, para ir al fondo del asunto, consiste en pedir cuentas al ser, que muestre lo que trae consigo, lo que reafirma.

Una idea preparada para encarar la problemática a la que el ser está dispuesto supera la dependencia lingüística del pensamiento, su falta de disposición y lo que la idea del pensamiento deja de lado; esta problemática sólo se resuelve poniéndose por encima del lenguaje, situándose en ventaja ante su actividad.

Si no se pone freno a la inclinación del pensamiento por dejarse llevar por el lenguaje, la cuestión del ser, “ser ésto en lugar de ser esto otro”, deja inactivo el pensamiento, un vacío del mismo que no añade nada consigo; si, por tanto, se cede a la inactividad, si todo el recorrido del ser es ser una nada, una predicación esencialmente indiferente, un engañabobos, se desaprovecha la disposición a la que el ser está unida, de donde crece el ser, el sustrato de su actividad, lo que el ser afirma consigo.

La fenomenología, en este sentido, se centra en una modalidad del ser que está presente en un su interior, está ahí sin que todavía haya logrado presencia (**); el ser recorre sus capas internas, lo que hay en ellas. Se trataría, visto así, del “ser mismísimo” del que dependería el ser habitual y sin el que el ser, en efecto, no sería nada.

Conviene estar advertido al encarar los problemas fenomenológicos. No se piensan de buenas a primeras, con las capacidades que vienen de serie y de la mano de un pensar ingenuo. El progreso fenomenológico reside en que sea extensivo y, dicho de manera muy clara, lleve más lejos del sitio del que partió, que aporte algo.

(**) Este era el sentido de la figura de “la espera”.

[Asexperia]

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[ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO]

Hace tiempo ya comenté que la crítica de que la fenomenología era subjetivista, defendida por Bunge entre otros, supone el desconocimiento del sentido de las "Investigaciones lógicas". Y no sólo el desconocimiento de dicha obra, sino, más importante todavía, la trama histórica de la que surgió.

[Asexperia]

EDMUND HUSSERL (1859-1938 )

http://akifrases.com/frases-imagenes/frase-los-filosofos-en-la-actualidad-son-muy-aficionados-a-la-critica-en-lugar-de-estudiar-y-edmund-husserl-183395.jpg