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Ver la versión completa : Las apariencias engañan



Neftis
18/03/2013, 08:36
Las expectativas fueron enormes durante dos días, ya que teníamos que ir a cenar a dos lugares muy diferentes entre si.--Éramos tres matrimonios amigos, invitados por una pareja más joven.-

-En cuanto entramos en el primer lugar al que íbamos a cenar, lo primero que nos llamó la atención fue la casi absoluta oscuridad, tan sólo rota por varias velas encendiditas estratégicamente colocadas en los lugares más indicados.-

-El anfitrión era el cocinero, y nos aseguró que aquella noche probaríamos algo que para nosotros seguro era desconocido.-

-En un primer momento sentí una especie de recelo. El olor de la comida se esparcía por la estancia, y eran aromas completamente desconocidas para mí. Eso, y ver la mesa dispuesta de una manera poco convencional, me hizo dudar de lo que prometía aquel chico joven, sin mantel, solo cubierta por un llamativo papel que hacía las funciones, igual que las servilletas. Todo formaba parte de algo realmente nuevo, para lo que yo esperaba en una cena anunciada a bombo y platillo.-

-Para mi gran sorpresa, la cena resulto ser exquisita, cargada de especias, y aromas que daban un colofón a algo realmente novedoso.

--Al salir de allí, pensé que me iba llevándome un grato sabor en todos los aspectos, me olvidé de la falta del mantel, y pensé en cuan acertada había sido toda la comida. Desconociendo desde luego el nombre de aquel manjar que sabía tan bien al paladar.

--Nos faltaba la visita a los otros amigos. Allí lo que nos sorprendió gratamente, fue la elegancia de todo el conjunto en general, la estancia era espaciosa, los muebles de un color muy claro y la gran lámpara translúcida, hacían refulgir los cubiertos, acerados dándoles un tono azulado que resaltaban preciosos sobre el mantel de una blancura impoluta, adornado con bonitos encajes y puntillas hechas a mano. Todo era un verdadero primor.-

-La percepción de todo aquello me hizo pensar en las exquisiteces de la cena que nos agasajarían, si estaba en consonancia con lo que estaba viendo.-

-Y oh!!! . Vino la gran decepción…

--La comida resultó ser insulsa, insípida, algo que en ningún momento logró llenar nuestro cuerpo, ya que al no gustarnos, sólo comimos lo justo para no desairar a los anfitriones.

-Completamente al revés de lo ocurrido la noche anterior. Donde no había luz, ni un mantel primoroso, pero la comida resultó ser de las mejores cosas que he comido en mi vida.

-Muchas veces he recordado estos dos episodios, ocurridos mucho tiempo atrás, recapacitando y pensando en la cantidad de veces que a lo largo de nuestra vida, tenemos que soportar este tipo de situaciones. Las apariencias a veces no están a la altura de lo que esperamos.

Por suerte en las dos cenas prevaleció la amistad, dejando aparte la comida y el ambiente que nos rodeaba. Y las dos noches dejaron un recuerdo amable.

Neftis

Avicarlos
18/03/2013, 09:31
Muy bien encontrada la comparación, amiga Neftis. Y así es. No pocas veces nos llevamos chascos.

Un abrazo Avicarlos.

Caracolamarina
18/03/2013, 12:50
Neftis...A veces lo más sencillo guarda grandes sorpresas al paladar. No pocas veces hemos sido seducidos, por platos y manjares servidos, en tabernas, que lo que menos tienen de elegantes. Pero la comida esta hecha por cocineros tan expertos en las artes culinarias, que nos han sorprendido los sabores y exquisiteces que nos han dejado satisfechos y contentos, con sabores deferentes y además con la grata sorpresa que nos hemos llevado...

Y muchas veces también hemos ido a ligares muy elegantes que el brillo y esplendor del local, no tenía nada que ver con la comida servida....que era no sólo insulsa, sino que, no tenía los sabores, que uno espera de una cena bien hecha...

Linda experiencia, has tenido, porque compartir es lo más lindo, de disfrutar la compañía de los seres amigos.
Saluditos y saludines....

Eburnea
26/03/2013, 11:20
Y yo insisto en que quizá las dos fueron buenas experiencias. Una porque en sencilla mesa se encontraban exquisitos manjares y otra por el buen gusto de la anfitriona en vestir su mesa ( cosa que hoy abunda poco). Claro que si se hubiera esmerado un poquito más en el menú, MEJOR.
Besitos. Ebúrnea