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Koli33
11/10/2012, 19:56
Asumo la mentira como principio de mi realidad: o de lo que se suele llamar como el origen de la extraordinaria y muy concreta experiencia, de lo denominado, en este caso, como la falsedad de mí ser.

Algo que se sostiene (repite y palpa) sobre una supuesta potencialidad, sumergida, intangible, y en tanto esto, al margen de tal verdad.

Sobre los autos engaños y mentiras (en invirtud de este principio) artificio de nuestra experiencia, actividad y creatividad mental, a partir de la mediación de nuestras ideas, construcciones mentales, dadoras, productoras, generantes de nuestra experiencia: y en tanto esto, de todo nuestro mundo, (supuesta y objetiva realidad, como muy concreta objetiva falsedad) construida a partir de la experiencia, es decir la mentira y el engaño.

(Realidad alcanzada en función de la potencialidad generativa, como de la asimilación y aceptación de los productos mentales, empleados utilizados, como derivados objetos responsables de la misma)

Soy un hombre, un constructor, una asumida y estructurada idea, forma fragmentada y determinada mentalmente, como objeto-sujetó a determinada experiencia productividad, por la forma mentalmente aceptada, sumida, por mi mente, en tanto tal, producto de la mentira y el engaño, porque estoy siendo representado y sostenido, determinado y limitado, mentalmente, por los atributos y fines, sociolingüísticos, conceptuales, que el orden mental, en su necesidad de realización manda. Le demanda, le exige, y nos impone, como cumplimiento y adaptación productiva, a sus construcciones y objetos, estructuras e ideas, en tanto esto, existo como tal, por la actividad discursiva, objetiva y practica, estructurante y productiva, establecidos , dados , impuestos, por los atributos representativos autoritarios mediados por la palabra, es decir, por la mera fabulación y cristalización de unos productos, una ideas, unas construcciones, creadas socialmente, mentalmente ideadas, y mental lingüísticamente trasmitidas establecidas en la psiquis de todos aquellos que realmente desconocen quienes son.

, para la producción y generación de una determinada realidad y experiencia, consecuentemente con concordante y asumidas formas socioculturales. Para recién a partir de estas tener y poseer una experiencia respectiva, por la acción y los intereses( en este caso) de las fuerzas y los poderes productivos-formativo-estructurante, que rigen y determinan en la forma, la estructura productiva de sus objetos, en estos caso la formación práctica, funcional productiva de sus obedientes y eficientes funcionarios, y en tanto esto, el comportamiento previstos, la realidad prevista de sus de su formas , instrumentos, aparatos y estructuras productivas, acatando y asumiendo los intereses de unos desconocidos mecanismos, de algo denominado como mente, de la práctica de una inteligencia y un pensamiento social, que rige el orden estructural productivo de la materia, y en tanto esto, de los su dichos servidores, representados como los míseros seres vivos, de muy poco valor o de casi sin ningún valor, en muchos ámbitos del orden, subordinados a la materia.

Y que como tal, como un extraño y oscuro personaje, obedezco a todo un mundo, (una realidad, un contexto) fundado en la mentira y el engaño, en la falsificación y la estupidez.

De aquí que no crea, ni tome en serio, lo que yo pueda ser y representar para ti, y menos para este mundo.

Estoy convencido de que esta falsa y concreta experiencia del engaño, que asumo desde la práctica de la mentira, está muy lejos de llegar a ser una experiencia de lo que se autodenomina como lo real.

La mirada se prenda de la imagen, la mentira, se enamora de las múltiples formas de la segmentación y materialización representativa de esta.


La división y segmentación es imposible, en tanto esto, la experiencia de la fragmentación y división, solo son posible por los atributos y artificios de la mentira y el engaño.

Toda imagen, en sí es, cuando se queda quieta, inmóvil, cuando se puede retomar una y otra vez, una mera construcción reconstrucción mental, de una somera cosa, que no cambia, no se transforma, que subyace inerte, realmente muerta-ajena, o al margen de la vida, aunque de su forma y estructura, productiva, emerja una experiencia, una forma de productividad-realidad, toda imagen es en tal sentido espacialmente determinada (disfrazada, se viste de farsa en su ilusión) a partir de la negación, como lo contrario, al movimiento, o a el cambio, o a la transformación constante.

La palabra es signo, instrumento representativo, de toda forma de registro, como patrimonio representativo, de esta supuesta acumulación de imágenes, construcciones mentales, estructuras operativas, productivas, manejadas y utilizadas, empleadas por el intelecto y el lenguaje asociativo, que cumplen con la acción reproductiva del orden y el poder externo, para decir, señalar, especificar a través de ellas, la construcción del engaño la mentira, en que se sustenta y cimienta nuestra prodigiosa civilización.

La determinación de algo indeterminable, en tal sentido es imposible, ni la foto, ni la palabra, ni ninguna imagen, alcanza el sentido de lo real, aunque signifique algo absurdo, para diferenciar, distinguir, significar lo que no se puede por medio de su uso. Ni por el medio, del producto creado, desarrollado por un artificio, artilugio, de la productividad de nuestro auto engaño colectivo.

El discurso falas, usado empleado como el testimonio, como el mecanismo del movimiento fílmico, de la asociación dinámica de unos sucesos ficticios, ponen en juego, en funcionamiento, la simulación dinámica, hacia el adentro de nuestras cavernas, cabezas, donde tienen función y difusión, un rodamiento, la naturaleza artificial de tales fisiones, fragmentos y mentiras.

Koli33
11/10/2012, 19:59
Los fantasmas, los constructos creados, cobran vida y un protagonismo cierto, por el movimiento, como porel arte y el artificio de la película, de nuestra autoría, fisiones eilusiones, como del discurso colectivo del que somos impregnados.

La palabra entonces, como la única posibilidad dehacernos real, en el relato , atreves del relato, en la construcciónficticia, para auto representarnos y auto reconocernos en la ficción, elengaño, la mentira, es decir, es decir, a partir y en función del material dela única realidad posible, con que vestir, cubrir, ocultar nuestrainvisibilidad, y a partir de esto simular nuestra existencia( con nombre yapellido) ante nuestra inexistencia, sostenida por nuestra virtud deembusteros. El lenguaje, la palabra, se convierte en lo concreto del materialcon que se operan, crean, reproducen y representan, constatan y reconocen, como auto se certifican, la danza de las mascaras, de las mentiraspropias, como las ajenas ante ojos y espejos, las construcciones de los filmesmentales, esta forma de realidad parece ser entonces la única posible.

Con que se adviene a auto determinar, los contenidos ysignificados de nuestra dinámica experiencia, ficción, visión comprensión,etc., de tales objetivas realidades, sucesos, materializadas y rodadas, comoprotagonizadas y representadas, un y otra vez, atreves de laconstrucción, reconstrucción constate, rodada por el relato de nuestro, yoes yego-retóricos, auto sumidos protagonismos, sementados, como los melodramasmentales de nuestras aflicciones internas, viene a significar laimposibilidad de toda verdad.




Las palabras que se aprenden, se elaboran,registran, copian, cifran y almacenan, con las que se crean y determina grandesideas, estructuras mentales, como patrones fijos, por intermedio de los cuales,al interactuar como una resistencia, por la que se desplaza fluye el movimiento, la corriente del espacio y el tiempo, como una energía que corre y sedesplaza por la resistencia de una bombilla de luz, crea y produce una realidadque parece brillar y vivir por si misma, proyectan y reproducen toda unaserie de fenómenos y patrones dados a la experiencia, y acordado ydeterminados por la forma , la estructura predeterminada fijada de antemano, en el caso del ejemplo por la forma y estructura de la lámpara, Formaanáloga en su productividad a las construcciones ideológica, por la ideamental, la construcción mental, empleada utilizada , creada para producirdeterminada realidad-experiencia subjetiva personal, que se le exigeimpone al sujeto, cuando se lo define con una idea, secrean y reparten estas construcciones como el pan, formas yestructuras, mentalmente estudiadas, creadas, que se toman y manipulanmentalmente, para producir crear determinada experiencia mental en el supuestootro, Tanto como se reproducen, nos auto reproducimos, mentalmente,artificialmente de esta forma y manera, para y a partir de la retencióncapitalización y acumulación, de la experiencia propia, en la autoretorica y discursiva representación, de la mentira, de la falsificaciónconstante, en la que nos auto reconocemos y auto experimentamos en la ficción,una y otra vez, nos terminan auto engañado y auto convenciendo de suimpostada veracidad.

Tan así, de importante, poderosa y esencial, que nos esla palabra, la imagen, la representación, su posibilidad de producción,reproducción, representación, como proyección discursiva, para uno, como paralos otros, (dadora de la única forma de realidad posible ostentadle yconstatable como algo) como derivada del poder de su magia, construida a partirde una realidad imposible de aprender, inmovilizar, segmentar, retener, copiar,congelar reproducir.

Sin embargo, este instrumento, constructo, objeto ymaterial mental nos permite lo imposible, transferir, clonar, propagar, crear yrecrear, reconocer y confirmar, el triunfo histórico del relato, de laposesión y cuantificación de la mentira, de su uso y abuso productivos, en eléxito de la falsificación y el engaño.

Nos ha permitido esto, el poder establecer un mundomental, fundado en el poder y el desprecio, atreves de la forma y la estructuraque solemos asumir, con la que, y atreves de la cual nos reconocemos (amen dela omisión de la ignorancia no reconocida) paralelo al real, falsificado pornuestra barbarie, como algo posible, como la mentira posible, el robo yel engaño posible, de lo que sea la energía, el movimiento, el poder, delllamado mundo real, a manos y por el poder de la llamada narrativacivilizatoria.

Transferir, clonar, propagar a otros sitios, la formas, los modelos, las estructuras productivas, como la reproducciónen serie, de la fábula comulgante, de la mentira redentora, dada y repartidacon la ostia, cosa que si es posible, a sido posible hacer y establecerpor el producto, la herramienta, la técnica que comprende e implica tantomilenios, de práctica de la falsedad, a través de la llamada construcción del desarrollo de la lingüística.

Es así, que sea lo que sea la vida –muerte, o merosnombres términos, como dados y falsos objetos, dables a nuestra experiencia,para nuestra auto construcción, dados a lo incomprensible, e inaprensible comoindefinible, de lo que sea la energía, el movimiento, el poder, de eso,definido y segmentado en nombres.

(La vida, lo que pueda ser eso, no se encuentra en losseres vivos, si no que constantemente se manifiesta, corre, se expresa, através de los llamados y determinados, como fijados y determinados,confirmados, por la mentira, como seres vivos, es un flujo “constante” que entanto movimiento en una constate transformación representaría a loindeterminable, he inaprensible, e innombrable, como imposible de determinar,por más que nuestras calificaciones, definiciones y nombre se esfuercen, ypretendan tal obtención, estos no la pueden definir, tener, ni retener, por másque la hagan suya, atreves del engaño , la falsificación y la mentira, comoobjeto de sí mismos, por medio de los nombres)

Sea lo que sea, absolutamente la desconocemos, laignoramos como experiencia, ya que vivimos la mentira, y de la mentira. Esdecir, a través y en función de los supuestos nombres dados a las cosas.

Dada la competencia entre tantos virtuosos ymaestros como profetas de la mentira, la falsificación y el engaño, podemos establecer la organización del gran jugo, calificable como elfraude de nuestra civilización, en tanto esto, es licito y posible,apelar al arte de la palabra, al artificio del desarrollo de la mentira, elenmascaramiento, para ocupar, negar, capturar, aprender, en tanto cuantocrear y disponer a voluntad de la necesidad del juego, de los amigos y enemigos, de los unos y otros, dividiendo en cuanta clasesea posible, lo imposible de dividir y fragmentar, creando moldeando el ser y la participación del otro, como su atención yparticipación en el juego, a través de un nombre dado, una historia, unamemoria, por la cual regirse y erguirse como alguien capaz de jugar yparticipar en la producción, el desarrollo de la mentira, el gran juegodel auto engaño colectivo, en función del poder crear, moldear, como definir la participación del otro, los otros , aimagen y semejanza de la necesidad del juego, en tanto esto, así poder disponerde la participación del otro, atrapada, definida y reglamentar suparticipación, por el tenor de la necesaria asunción de un nombre impuestos porlos intereses de la organización y realización, materialización dinámica delcurso y protagonismo histórico de la gran mentira, del gran juego, quedefine por la naturaleza del mismo, los niveles de participación , a través dela acción y el don del poder nombrar y por aquí poder establecer yotorgar la definición y participación de cada quien. Otorgada por el orden y ladistribución del juego, en lo que se dice y establece y se decideanticipadamente la participación acondicionada de cada jugador, actor, como elpapel y el rol, de su segmentada fragmentada vida, energía, participadade la gran farsa, productiva, de una gran y muy dinámica ilusión, con queescapar y cubrir ocultar, lo que sea lo real.

Suministrándonos el gran poder del juego, una realidadobjetiva, falsa, artificial, creada por la imperiosa necesidad de suacontecimiento y desarrollo, como fin histórico, o en nombre de las imperiosasnecedades económicas productivas del gran juego y mentira.

Categorías y definiciones otorgada e impuestas, comorepartidas por la falsedad del absoluto poder de nombrar, dada en suplanto del robo, la expropiación, de lo realmente desconocido, esdecir de lo que sea, la supuesta indeterminación de lo denominadle comola vida-muerte, en su imposibilidad e indefinición.


Osando auto representarme como el gran poder, quedefino el juego, y las reglas del mismo, puedo hacer y establecer la necesariadivisión de la energía, para que la energía, auto confinada, auto esclavizadade alguna forma, reducida a un nombre, a una forma fijada yprescrita por mí, trabaje para mí, y me sirva y rinda su esfuerzo,confinada-productividad a mi intereses, en la auto sustentación, yautogeneración de mi juego, de mi mentira, y para el auto convencimiento delpoder de mi acción, y la supuesta desgracia de la energía, lamuerte-vida, explotada segmentada por la aflicción de mi juego.

Puedo hacer que me entregue lo mejor de su vida–muerte, de su realidad, de su mundo, a cambio de mi construcción, y que elpase a ser con su indefinición y energía, vida-muerte, lo que yo quiera quesea, y crea necesario, imprescindible, que el otro creado y establecido por mipoder sea, logrando que la realidad sea, se adapte productivamente a mí ymis intereses, como intenciones, de posesión de lo que sea, el sacrificio de su poder que atreves de la forma y el nombre, que le impongo , le exijo.

Koli33
11/10/2012, 20:01
Me sirvo personalmente, verbalmente, lingüísticamente de la realidad construida por mi relato, imponiéndola como la realidad, la verdad absoluta, revelada por mi palabra, la visión, mi visión.

De la que no podrá escapar, ya que yo se la confirmo, ya que arteramente, mentalmente, con mi autoridad consagrada y consolidada por todos los santos, (por algún relato sagrado) lo castro, lo privo, lo anulo, lo ciego, lo imposibilito, como creador, de palabra y mundo, de falsedad y mentira, es decir de alguna genuina forma de realidad o mentira, o mediocre forma de mentira. A todos aquellos que puedan intentar osar y establecerse como competidores, ostentando liberarse del mi invento, de las reglas originarias y sagradas del producto de mi juego, es decir obstando liberarse del verbo, de la división y distribución de la realidad, la mentira, es decir, intentando liberarse del la mentira con otra mentira.

Es decir que le impido ver, crear, liberarse de la mentira, haciéndole ver, creer, lo que a mí me interesa que vea, crea y cree, capturando su tención, atención, en virtud de el nombre, la realidad fragmentada y acotada, a la definición y la forma que le atribuyo.

Le impido, le prohíbo, mentir-crear, es decir, que sea hacedor de otras formas de auto engaño, auto mentira, privándolo de verdad, libertad, es decir aseso y contacto con la inexistencia, haciéndole esclavo de la existencia. De mi voluntad, atreves de una mentira, la materialización relatada del engaño, en virtud de una gran construcción, visión colectivizada, en la organización de la farsa,

Emeric
15/11/2012, 19:50
De aquí que no crea, ni tome en serio, lo que yo pueda ser y representar para ti.Te doy toda la razón. :biggrin:

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 06:15
Te doy toda la razón. :biggrin:

¿En qué, que no se crea, ni se tome en serio, lo que sea y represente al otro?. Defiendo exactamente lo contrario: que el otro tiene una ventaja que uno no tiene.

Esa supuesta independencia de la propiedad frente al otro es un error en la declinación moral o, peor aún, una falsa ventaja del pensamiento; se niega "en abstracto" lo que está "presente"; lo único que se mueve es el pensamiento que va detrás de todo lo que le es primero. ¿O el otro es cosa del retraso del pensamiento, la falsa totalidad que éste, erróneamente, reproduce?. Según yo lo veo, el otro es un problema porque no está a la altura del pensamiento que hay disponible para él; al contrario, el otro es desplazamiento -de uno-.

El otro conlleva un forzamiento, de ahí que sea la causa de moral. La moral no surge como una normalidad sino, mejor visto, como una respuesta al nexo que falta.

Si no fuese por el otro, no habría moral. Y así es que la moral es, generalmente, causa de distancia moral. ¿Y, siendo así, seguimos pensando que es, igualmente, pensable?

La generalidad de la distancia moral es lo que estudia la sociología, una especie de antropología filosófica que se centra en la falta de propiedad.

Emeric
16/11/2012, 06:21
Si no fuese por el otro, no habría moral.Exactamente. "L'enfer, c'est les autres".

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 07:23
La idea de la cita que trae usted confunde la ética con la estética. Hace de la estética una totalidad, y deja la ética a un lado; el otro es juzgado por su apariencia, no por lo que hay tras ella. Hay un juicio sin otro pensamiento distinto del juicio mismo; el jucio se queda en un juicio dado sin otra idea distinta de sí. Así pues, la estética se queda en pasión de sí misma a la falta de una idea que la interiorice.

Emeric
16/11/2012, 07:29
La idea de la cita que trae usted confunde la ética con la estética.Pfff ... No me importa. Te encanta complicarte la existencia, ¿ eh ?

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 08:49
Pfff ... No me importa. Te encanta complicarte la existencia, ¿ eh ?

¿Por qué es tan impertinente?. Trae una cita que no entiende, y se queja de que dé los detalles pertinentes. Le repito que si no le interesa el tipo de detalles que yo tengo, me es igual. Puede haber muchos otros distintos de usted que sí estén interesados en ellos; éstos son, sin duda alguna, muchos más que usted. En ese cabal sentido, sus intereses no son importantes. Usted quiere que la filosofía sea un entretenimiento, que sea entretenida, una cosa cualquiera como cualquier otra, algo indiferente. Les dejo esa filosofía a los que se sirven de la filosofía para entretener. Yo no pretendo entretener sino que mis ideas alumbren asuntos oscuros para el pensamiento.

La moral es un encerramiento, una cárcel, o un infierno, si quiere usted. Pero eso no dice nada importante si se deja de lado la cuestión de fondo sobre la moral.

La reflexión moral, en una tradición tal que podamos hacernos una idea de cuál es el problema moral, descansa en la conducta en un sentido más amplio que uno mismo.

Sin embargo, no me refiero al ámbito moral como un ámbito espacial (*). No es un espacio que esté, por así decir, cortado bajo el esquema de la sensibilidad, que esté en ese mismo espacio (**). ¡No!. Por eso la estética no puede ser una totalidad propia que no requiera ética.

La reflexión moral es capaz, por sí, de elaborar las ideas que hacen falta para pensar la moral que el pensamiento, por sí, no es capaz de pensar. Hace falta, pues, un concepto moral que permita pensar lo que no es pensado sin ese concepto.

La moral es el ámbito de la convivencia, y la convivencia no es un ámbito propio sino todo lo contrario; es un ámbito impropio, un ámbito que sustituye la propiedad. Así que el infierno de la moral no es otra cosa que la falta de idea sobre uno mismo. ¿Ve ahora que se habla de las cosas sin tener en cuenta qué se debiera pensar de las cosas? ¿o las cosas son según se le antojen a uno, y no hace falta otro pensamiento que el que ya hay?

(*) Este ámbito es una idea malévola sobre la habitual alineación filosófica a las órdenes de las modas imperantes y los sedimentos que de éstas quedan. El espacio moral es una idea del espacio que no está enteramente en la sensibilidad ni, puramente, en el intelecto, y, por tanto, ha ser elaborada para que pueda ser pensada; no es una idea cualquiera.

El famoso filósofo Martin Heidegger tuvo la ocurrencia de pensar la ética como un espacio propio que ocupaba un ser que actuaba más allá del ente que determinaba su conducta; semejante idea no tiene más valor que haber ampliado la ética a un espacio en el que la ética ya debiera estar. ¿O hay ética sin objeto ético, una ética falta de objeto ético? Quiso ampliar la ética añadiendo a ésta una filología que pusiese en orden el pensamiento pensando lo que había en las palabras y no en las cosas. En lugar de pensar lo que podía ser pensado en cuanto a la ética, y, por tanto, lo que podía enriquecer su reflexión, se eligió pensar las palabras y atajar el pensamiento con un truco interpretativo (***) que privaba de pensamiento al pensamiento imponiéndole una forma lingüística. Por ese camino, la ética, claro está, se quedó sin otro sustento que el de una morada sin el cabal conocimiento de su lugar.

Entiéndase, en todo caso, que mi idea de la moral no tiene nada que ver con las ideas de Heidegger. Por mi parte, todo lo que Heidegger pensase podría ser desechado como impropio de Heidegger; fue un excelente lector de filosofía, pero hizo poco más que enseñar a leer a los que, por lo visto, no sabían leer.

Por otro lado, cuando hablo de un espacio moral pienso en algunas discusiones que tuve en cuanto a la configuración del espacio y el desorden de su experiencia afectiva. El espacio del otro no corre al mismo ritmo que cualquier otro espacio; el espacio del otro no es neutro (****)

(**) Me refiero al ámbito interno y la modificación de su experiencia consecuente. Con sólo apercibir los mínimos detalles cuantitativos que se añaden de una experiencia a otra se comprueba que toda experiencia es una totalidad individual distinta de las experiencias antecedentes; ahora bien, ¿de qué tipo de unificación se servirá la moral para seguir igual ante el cambio?. Particularmente pienso que la mayoría de los autores que sigo en este tema (principalmente Kant y Schopenhauer) no tenían las ideas que se requieren para pensar la moral, pero sus ideas son muy ilustrativas en cuanto a una Historia de la filosofía y sus ideas. Obsérvese, en todo caso, que el esquema de la sensibilidad kantiano tenía una idea enormemente problemática en cuanto a la modificación que actuaba en su experiencia; la experiencia, por tanto, no era igual que la idea de la experiencia ¿O Kant pensó una síntesis como una idea más?. ¡No!; era una idea nueva, una idea del pensamiento. Schopenhauer, por su parte, criticó con dureza la falta de fundamento de la idea de la moral de Kant, el imperativo categórico y el fracaso de una auténtica razón moral. La idea de la moral de Kant era una idea negativa en la que el pensamiento ponía la moral que le faltaba al pensamiento, una nada moral. ¡La gran chapuza de la idea común sobre moral!.

(***) Este truco es de sobra conocido en los ámbitos filosóficos con el nombre de Hermenéutica. Pero esta hermenéutica ya no interpreta los escritos sino lo que hay en los pensamientos.

(****) Esta idea conlleva algunas paradojas temporales, por otro lado, muy aclaradoras. La mayor parte de la experiencia de la conciencia es recreativa, no creativa; es a priori, no una experiencia inclasificable. Por otro lado, de no ser así, si la experiencia fuese creativa, la conciencia difícilmente terminaría en una consciencia. Puedo pensar en experiencias sin consciencia, pero es difícil comunicarlas. Vg. los sueños.

Emeric
16/11/2012, 09:12
Trae una cita que no entiende.Sí que la entiendo. Es usted quien siempre cree que los demás no entienden nada, y que usted es el único que lo entiende todo. Pfff ...

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 09:48
Me parece muy bien que diga lo que quiera. ¿Que la entiende dado el problema que yo expongo sobre la moral?. ¡Muéstremelo!. Como usted imaginará, que usted me diga que lo entiende sin mostármelo, es como si no me dijese nada. Lo dice su orgullo; a mí, no me dice nada.

Citar a filósofos sin entenderlos es pura pedantería.

Emeric
16/11/2012, 09:50
Citar a filósofos sin entenderlos es pura pedantería.Ya le dije que sí que entiendo esa cita filosófica que hice.

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 09:52
Ya le dije que sí que entiendo esa cita filosófica que hice.

No haga como si no entendiese lo más fácil: ¡muéstrelo!

Emeric
16/11/2012, 09:56
Exactamente. "L'enfer, c'est les autres".En el post 6, (el que cito aquí), ya vimos que coincidí con lo que cité de usted ahí mismo. Entonces, si estoy de acuerdo con usted no tiene por qué atacarme.

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 11:16
En el post 6, (el que cito aquí), ya vimos que coincidí con lo que cité de usted ahí mismo. Entonces, si estoy de acuerdo con usted no tiene por qué atacarme.

Que usted cite mis palabras y añada un aforismo puede que lo ponga de acuerdo con lo que escribí, no con lo que yo pienso sobre la moral.

Y no se haga una falsa víctima. Usted ha dejado claro que no quiere detalles filosóficos. En este foro, la actitud amistosa se entiende con razones; estaría bueno que supusiese que vea en usted sensibilidad por los detalles que se ocultan al pensamiento; e imagino que estará de acuerdo en dejar ese tipo de retorcimientos filosóficos para mí; de nosotros, soy yo el que "se complica la existencia con ellos". Por ejemplo, cuando hablo de moral buena parte del problema afectivo está en cómo establecer un mismo marco representativo; los estados afectivos no van a la par que los del pensamiento (*). ¿Así pues, a partir de qué se entrelazan distintas subjetividades separadas por infiernos existenciales? ¿o será que la moral es el infierno predispuesto a rellenar el espacio de la existencia que sin moral está desocupado?. ¿Sabremos más de la moral porque es infernal, o porque ocupa cierto sitio que estaba "en falta"?

No comulgo con ningún existencialismo. El único autor al respecto con el que coincido es Søren Kierkegaard, y sólo admito de él algunos detalles, por cierto, excepcionalmente sutiles y, por tanto, bastante alejados del lenguaje común. El mayor valor de Kierkergaard no está en que fuese “entretenido”; muy al contrario, es un autor con un pensamiento muy complejo. El mismo Kierkergaard admitió que daba por supuesto que el lector sabía, al menos, todo lo que él sabía. Muchos de sus escritos no parecen estar en ese nivel de exigencia; entrarían en lo que entendería por estética (era un escritor brillante), diferenciada de categorías que estaban por encima. ¿Una especie de ciencia primera que sonsaque las categorías que se ocultan al pensamiento?

(*) Esta idea se viene repitiendo en muchos de mis escritos desde hace varios años. Ha surgido en temas muy distintos con la característica común de ir a parar a la cuestión de la moral. Visto más problemáticamente, significa que el retraso del pensamiento ha de tener un patrón interno común a partir del que puedan surgir diferencias aparentes sin relación íntima con la sustancia de la que éstas dependen.

Koli33
16/11/2012, 13:58
Voy a suponer, un lenguaje natural, el originario, por el que se constituye en su discurrir pronunciación el mundo, ante un discurso notorio, portentoso, arbitrario, tirano, como el nuestro.

Discurso avasallado negado, invisibilizado, que vivimos conjugamos por nuestro cuerpo, vertebras riñones, intestino y sangre, pulso y latidos, boca y labios, dientes y excrementos, emociones y sentimientos, ideas y pensamientos, a posterior de nuestro invento gramatical.

Nos encontramos, pese a la negación totalmente implicados, como seres vivos, meros vocablos y términos del discurrir viviente, asociado a tal habla, discurso, lenguaje o forma de discurrir del universo, que se expresa independientemente en sus formas y términos, desoyendo nuestra soberbia, ceguera y voluntad gramatical verbal.

Voy a todo esto, suponer una traducción, un cambio, un salto, de sentido y significado, de un discurso, una lengua, a otro discurso, otra lengua.

Es más, a esta lengua desde la que me expreso, la interpreto como una pésima traducción, a extremo de ser más que una mala traducción, una gran traición, de tal lenguaje, de tal voz, pronunciación, producción del ocurrí y discurrí de tal discurso.

Por parte del arte de nuestra mente, la mente implicada en todo esto, aquí empieza la mentira, el arte del gran engaño, la gran mentira, la gran traición, como pésimos intérpretes, traductores del mundo, la vida, la belleza, que traicionamos cuando pretendemos traducirla a nuestro dominio control, vocabulario, a nuestros sentidos, significados valores y creencias.

Aquí empieza la mentira, cuando el mundo y la realidad nos son traducidas, trucadas, cambiadas, transformadas por las condiciones productivas reproductivas creativas de nuestras palabras y términos, signos virtuales y gráficos.

Por medio de una lengua, “un verbo divino”, creado, inaugurado por la acción motriz, discursiva, creativa de la mente.

Aquí empiezan todos nuestros problemas interpretativos y de traducción, de un lenguaje mundo a otro lenguaje mundo.

El acto inmoral de existir, se impone y establece sobre y a partí de una mala traducción, se inaugura aquí, en este acto extremo de traducción cambio, salto, transformación, de una gramática a otra muy distinta y distante del fenómeno viviente, como discurso otro, aberrantemente traicionado.

En tanto el lenguaje recientemente creado, inaugurado, se impone sobre todo el lenguaje originario, el de la vida, como el lenguaje verdadero, legitimado por todos los santos y dioses del Olimpo, como el cierto al que ay que someterse respetar y obedecer, rendir honores y tributos, seguir y venerar como a la ley etc., etc.

Esto es a mi entender un acto inmoral, por eso cuando hablo, procedo a presentar, “mis ideas, pensamientos”, miento.

No puedo hacer más que reproducir, producir virtualmente el engaño y la mentira.
No sé si las expectativas sobre el problema moral, de la moral, expresado pro Alberto, se pueden asemejar a mi interpretación.

Un saludo

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
16/11/2012, 14:26
El sentido que doy a la moral es, en gran medida, representación; es la unificación de, al menos, dos entes. Pero no como idea a secas. Más bien, es distante, porque la moral a secas, tal cuál, está en constante cambio (*). Así pues, lo inmediato se retarda y suspende hasta hacerse ¡próxima!. No está en un abismo inaproximable de una manera indefinida. Con observar a dos niños pequeños que no hayan desarrollado bien el lenguaje se comprueba ésto. A este respecto, hace años, fui testigo de un caso de comunicación no verbal que me dejó muy sorprendido. ¡Un niño pequeño entendía maravillosamente una lengua distinta de la suya!. Eso significa que el tráfico fluye por encima del límite que impone el lenguaje; dicho de otro modo, hay una predisposición al otro (*).

Por otro lado, parto de que los problemas de la moral a los que me refiero, en buena medida, se pueden conocer. La postura contraria, el hastío posmodernista, es un ejercicio principalmente literario, no filosófico. ¿Qué postura es esa que defiende que no se puede conocer?. Los problemas filosóficos parten de que sí se pueden conocer. Hay, por supuesto, lugar para ampliar los asuntos problemáticos, pero la negación de una afirmación sin nada a cambio no va a ningún lado.

(*) Esta idea es el principio de una idea sintética de la moral. Sin ella, sólo hay ideas morales dadas; sin ella, no hay una idea del pensamiento moral. Por otro lado, esta predisposición es mucho más compleja que una simple predisposición al otro; es, más bien, que el otro debe estar ya ahí para que se represente.

(*) Esta puede, perfectamente, ser la razón por la que se dejó de lado su verdadero problema.

Emeric
16/11/2012, 17:38
Que usted cite mis palabras y añada un aforismo puede que lo ponga de acuerdo con lo que escribí.Y eso fue lo que quise hacer. Así que dejémoslo ahí.

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
17/11/2012, 05:51
Emeric, déjelo donde más le plazca; yo no voy con usted. Es lo que quería señalar de su postura y en qué se diferencia de la mía.

Este tema lo abrió Eduardo, y participé en cuanto leí que usted citaba una idea que permite cierta problematización: "la independencia de uno con respecto al otro". Por otro lado, me resulta extraño que se adhiera a esa postura conociendo su atracción por el psicoanálisis. ¿O uno se despoja del "otro psicoanalítico" como se quita una prenda cualquiera que le sobra?. Yo iba por ahí, sin que siga ese camino.

Emeric
19/11/2012, 05:32
Asumo la mentira como principio de mi realidad
La verdad y la mentira son las dos caras de la misma moneda.

Koli33
19/11/2012, 07:18
En el mero juego lingüístico sí, son dos caras de una misma moneda, podemos jugar con ello indefinidamente eternamente, como dos niños con una moneda, pero yo la llevo como fundamento a su extremo, la arrastro a los cimientos constitutivos de esta civilización.

Al asumir la mentira, al tomarla como principio de mi realidad, equivale a asumir que mi realidad y mi mundo se sustentan como mentira, como el engaño, sobre el engaño, sobre la ocultación, la explotación, la destrucción de una gran verdad de fondo, sobre la que se sostiene y alimenta la mentira, sobre algo se tiene que sostener, y a partir de algo construir. Pensemos en las catedrales, los monumentos del poder, los del conocimiento, las iglesias, los palacios, los estados etc., sobre algo se tienen que sostener, de algo se tiene que servir y alimentar, en algo reconocer y justificar papeles escritos , documentos sagrados etc., .

Al aceptarme y reconocerme en la mentira, como producto de la acción y la capacidad de mentir, de construirme sobre la mentira, Indirectamente le estoy dando un lugar a la “verdad”, totalmente desconocida y negada, despreciada y torturada, por la acción productiva constructora de la mentira.

Le estoy dando un lugar a un lenguaje desconocido sobre el que se semienta y erige el lenguaje la falsedad, la mentira, los engaños de nuestro mundo. Todos los gorditos y acomodados, los beneficiarios de este circo, clase alta, banqueros coroneles, clase política, elite y cumbres religiosas, etc., que viven comen y duermen, a pata ancha, de la mentira, y en la cima de la mentira, como maestros del engaño, no creo que acepten de buena manera tal cosa, tal posibilidad. Ya que no creo que este foro en su difusión llegue a importunarlos en sus sueños.

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
19/11/2012, 09:05
Un detalle importante: la mentira no es lo mismo que la falsedad. Hay un matiz en la intención; la mentira presupone el engaño.

Esto es importante porque en el telón de fondo de la verdad y su totalidad hay sitio para su complejidad, para pequeñas licencias. ¿De cuántos pequeños defectos se sirve una verdad?.

La psicología del engaño es, a mi modo de ver, algo bastante complejo. Es importante distinguir la lógica de los pensamientos del trasfondo que hay en ellos (vg. psicológico o sociológico).

La expectativa de la lógica es una cosa; las argucias que hay tras ella, otra muy distinta. Por así decir, son niveles distintos.

Para mentir tengo que manipular otra mente; por el contrario, puedo decir una falsedad sin saberlo y sin conciencia de su contradicción.

La experiencia psicológica está basada en montones de imprecisiones que no son, exactamente, verdad; en rigor, son falsas (*).

Hablar, pues, de mentira y no de falsedad es una elección entre palabras con cierto prejuicio. Da una impresión ideológica y de moralina. Hay un juicio presupuesto que no está del todo relacionado con la verdad sino con cierta cadena de juicios supuestos. Sin ir más lejos, parece que se está haciendo una declaración más política que filosófica.

Saludos

(*) Esta postura es epistemológica, y, en tanto que tal, es negativista. Es decir, la verdad no es positiva sino negativa. La verdad es un principio de razón y, en tanto que principio de razón, no está en la experiencia; la falsedad implica la experiencia de su contradicción.

Koli33
24/11/2012, 15:47
Tenemos varios lenguajes, nuestra realidad social cultural esta atravesada por varios discursos. Se encuentra estructurada entretejida como amparada por tales dinámicas, relaciones de poder, entres varias hablas, expresiones y manifestaciones.

El lenguaje de la ciencia se contrapone con su poder y autoridad en todo sentido al lenguaje de la poesía.

Sostengo, es una apreciación a discutir, que la realidad se reduce, empobrece, como la vida y la actividad discursiva de los hombres, por el lenguaje de la ciencia, voz que se impone con su autoridad y verdad legitimada por medios de sus instrumentos, sobre las hablas desprestigiadas, sobre los balbuceos no científicos, desarticulados, sobre el que se da y sostiene el encuentro de los hombres.

Se me ocurre, cosa a experimentar seria, que lo contrario acontecería si el lenguaje de la poesía, (ojo, al que también entiendo como traición traducción y mentira, pero en si más cercano a un mundo negado seccionado, dividió en propiedades, adjetivos y conceptos, bienes y atributos personales, pero ciertamente más alejado un poco de la las pretensiones institucionales del manejo de la verada absoluta , de la mentira absoluta,)por ejemplo, tengo mucho más esperanzas, expectativas sobre este lenguaje, por verlo y entenderlo más cercano, entre muchos otros, para reactivar un rencuentro movilizador con la vida y hacia la vida, silenciada y perdida, banalizada y ahogada en el más perplejo sin sentido, como aletargada y silenciosa, esperando por despertarse, de las grandes metrópolis, si este lenguaje despertara y ganara la ciudad, saltara hacia la calle, los medios de transporte, las plazas, los hospitales, los alberges para ancianos, las escuelas y las cárceles, hacia las universidades para contaminar humanizar el lenguaje del conocimiento, al que si veo y entiendo como totalmente alejado de la vida, es más, alejándose constantemente aun más en su pretensión científica y calificada de verdad correctora absoluta.

Estamos protagonizando un mundo donde prospera, la reglamentación, la regulación limitante y empobrecedora del lenguaje de la ciencia y el desarrollo, del dominio y el poder concentrado, traducido a poder a partir de la explotación y la negación de la vida, en unas pocas hablas, en una pocas manos autorizadas, sobre las que se deposita el futuro todo del mundo y la vida.
Manos instituciones que dividen y fragmentan la realidad, para comprenderla desarticulada, como un cadáver sobre una mesa de disección, a partir de la cual la traducen a su lenguaje legitimo, por la ciencia y la razón aplicada en ello, a su conocimiento legitimo, a el supuesto saber documentando, acumulable, en sus más ínfimos detalles. Poder absoluto de la gran verdad del saber y comprender redentor que nos guían y amparan, protegen en todo momento, a partir y por medio de esta pretendida verdad, reduccionista, mire por donde se mire,( verdad que se guarda acumula capitaliza en libros y cátedras de todos los colores) y del que se compone y vale sirve el avance y el progreso de la civilización. Ellos no tiene ninguna duda de que está compuesta la vida, de que está compuesta y estructurada la vida, a partir de escarbar y buscar en un cadáver, de seleccionar , dividir , analizar, estudiar, sus viseras una por una, sus partículas más elementales, en búsqueda de la gran verdad de su actividad y no sospechada razón, en búsqueda de los preciados conocimientos y saberes que traducen a su lógica y razón, al principio de su razón, como el dominio del conocimiento verdadero, autorizado y cabal de todas las cosas, y más precisamente sobre cualquier cosa que respire.

Esta mentira, esta gran mentira institucionalizada concentrada en una muy pocas manos, como el gran poder incuestionable, traducido y concentrado a las grandes catedrales del progreso, que se apropia del conocimiento y la explotación científica de la vida, este sí que es un conocimiento positivo, sin desperdicios, pero que en ningún momento toma y respeta la vida, como cosa preciada en sí misma, podríamos decir verdaderamente sagrada, en ningún momento este conocimiento toma en cuenta, como un valor a respetar y persevera el conocimiento inherente implícito en toda forma de vida.

A la prueba me remito, los cientos de miles de millones de personas durmiendo y comiendo de la basura, a la orilla de las grandes metrópolis del desarrollo, entre caños de desagües pestilentes, ríos y arroyos contaminados, en que ya casi no sobrevive nada, compitiendo por la sobrevivencia entre las ratas y compartiendo la vida entre perros sarnosos solidarios y fieles compañeros que reparte la ternura a lengüetazos con los niños confinados en tales guetos del terror.

Vida insultada, desconocida, negada, despreciada, mire por donde se mire, por su belleza poder y esplendor, por su solidaridad y resistencia a tanto conocimiento concentrado y amurallado, a manos de tanta verdad sacralizada en los nuevos templos de la verdad, con la que comulgan la fidelidad peregrina de los tantos de miles de fieles, que viven aterrorizados y perseguidos por sus culpas y delitos, por un miedo inconfeso, cargos de conciencia mal digeridos, que no permiten dormir, si no más que dormir drogado, auto enajenado como auto encerrado, en prisiones y en su jaulas cárceles privadas de lujo, drogados por el consumo narcotizarte, suicida, tranquilizante, de toda clase de banalidades y cosas superfluas, de espalda al mundo y a la vida, a su consideración y respeto.

Que puedo pensar de esta gran verdad, más que nos sea una gran mentira, una gran estafa, traición a la vida, y que puedo pensar de mi, producto participante de esta patraña, que no puedo no ser, ni resultar más que como siendo parte de una gran mentira, la mentira, de un asqueroso juego, que se caga en la vida, a la que ni siquiera quiere entender, comprender, atender, no digamos ya como algo portentoso amar, y menos respetar.

Como me puedo sentir en este momento, como me puedo concebir y mira, como un traidor de los vientos , de la lluvia , de la tierra, de los ríos , de los mares y oncéanos, de la sangre y la gente, menguada traspirada aplastada y traicionada por todo aquello a lo que se entrega por convicción, como me puedo sentir ante la destrucciones de la fauna y la flora, las selvas, los ecos sistemas del mundo, como me siento como me relaciono con esto, drogándome , dándole la espalda, siguiendo como todo el mundo con su mentira adelante.

Lamentablemente, para los intereses de la ciencia, lo que yo llamo como el conocimiento no me aleja de los otros, ni de la vida, no me posiciona en la alturas, sobre los otros, lejos de todo, lamentablemente este conocimiento de serlo, “ojo”, que me está siendo dado por la vida, me lleva hacia los otros, me acerca a los otros, me une de una forma a la vida a los otros que no puedo explicarlo, me hacer quererlos y amáralos como nuca pensé que podría querer y amar a algo a alguien.

Emeric
27/11/2012, 10:16
Un detalle importante: la mentira no es lo mismo que la falsedad. Hay un matiz en la intención; la mentira presupone el engaño.Pero también puede conllevar falsedad.

Emeric
28/10/2013, 09:23
Alberto se quedó meditando en eso ... :pray:

Emeric
22/11/2013, 16:09
Pero también puede conllevar falsedad.Los que venden artículos como relojes, camisetas, carteras, etc. de pacotilla como si fueran fabricados por grandes marcas comerciales usan esos objetos falsificados para engañar a los incautos y enriquecerse. Así que la falsedad también puede conllevar engaño.