Neftis
28/08/2012, 13:23
A veces los recuerdos nos traen imágenes que a pesar de los años transcurridos siguen causándonos cierta desazón
-Hoy no he podido evitar sentirla, recordando el apuro que pasé en aquel tiempo. Todas mis compañeras sabían de mi afición a hacer imitaciones. Se me daban bien, y disfrutaba mientras las realizaba -me gustaba la interpretación, y di rienda suelta a mis ganas de protagonismo, pensando que algún día podría llegar a ser actriz. No era la primera vez que lo hacía, con otro grupo de amigas. Me fascinaba interpretar diálogos a veces eran de películas. He perdido la cuenta de las veces que he dicho A DIOS PONGO POR TESTIGO….-. Ahora habían transcurrido años, y aunque también era una escuela, ya no era para niñas, se trataba de personas adolescentes, que acudíamos allí, después de la jornada laboral.
-Nos dejaron solas, y no se me ocurrió nada más divertido que imitar a la directora del antiguo colegio. Era muy fácil de parodiar, por sus exageradas maneras de mover las manos. Y yo me sentía poco menos que en la gloria al poder dar rienda suelta a lo que yo ufanamente presumía de habilidad gesticulando y hablando con el mismo énfasis que la antigua directora.
Ver a mis compañeras reírse, era como recibir unos aplausos.
-De repente, enmudecieron, y el sexto sentido me avisó que tenía detrás de mí a la profesora actual.
-Nos miramos las dos. Yo completamente apabullada y asustada. Vi en el rostro de la profesora el enfado, convencida de que la imitación que estaba haciendo era la de su persona. ¡Dios mio, nada más lejos!
-Quise dar una explicación. Y no me dejó hablar. Solo dijo una frase que me dolió mucho más que una bofetada o cualquier castigo. Me dijo “Nunca lo hubiera imaginado de usted, la tenía por una persona bien educada” Dándome la espalda.
-Y en el más absoluto silencio por parte de mis compañeras me hizo salir de la clase, con la advertencia que no volviera en una semana. Intenté en vano hacerme oír. Quería que supiera que toda aquella pantomima no iba con ella.
-No hubo manera. Y esto también me dolió, aún hoy pienso que debieron dejar que me explicara.-Pero…. La vida tiene estas cosas
-Hoy no he podido evitar sentirla, recordando el apuro que pasé en aquel tiempo. Todas mis compañeras sabían de mi afición a hacer imitaciones. Se me daban bien, y disfrutaba mientras las realizaba -me gustaba la interpretación, y di rienda suelta a mis ganas de protagonismo, pensando que algún día podría llegar a ser actriz. No era la primera vez que lo hacía, con otro grupo de amigas. Me fascinaba interpretar diálogos a veces eran de películas. He perdido la cuenta de las veces que he dicho A DIOS PONGO POR TESTIGO….-. Ahora habían transcurrido años, y aunque también era una escuela, ya no era para niñas, se trataba de personas adolescentes, que acudíamos allí, después de la jornada laboral.
-Nos dejaron solas, y no se me ocurrió nada más divertido que imitar a la directora del antiguo colegio. Era muy fácil de parodiar, por sus exageradas maneras de mover las manos. Y yo me sentía poco menos que en la gloria al poder dar rienda suelta a lo que yo ufanamente presumía de habilidad gesticulando y hablando con el mismo énfasis que la antigua directora.
Ver a mis compañeras reírse, era como recibir unos aplausos.
-De repente, enmudecieron, y el sexto sentido me avisó que tenía detrás de mí a la profesora actual.
-Nos miramos las dos. Yo completamente apabullada y asustada. Vi en el rostro de la profesora el enfado, convencida de que la imitación que estaba haciendo era la de su persona. ¡Dios mio, nada más lejos!
-Quise dar una explicación. Y no me dejó hablar. Solo dijo una frase que me dolió mucho más que una bofetada o cualquier castigo. Me dijo “Nunca lo hubiera imaginado de usted, la tenía por una persona bien educada” Dándome la espalda.
-Y en el más absoluto silencio por parte de mis compañeras me hizo salir de la clase, con la advertencia que no volviera en una semana. Intenté en vano hacerme oír. Quería que supiera que toda aquella pantomima no iba con ella.
-No hubo manera. Y esto también me dolió, aún hoy pienso que debieron dejar que me explicara.-Pero…. La vida tiene estas cosas