Neftis
06/07/2012, 05:13
Veía a toda aquella gente apiñada alrededor de algo. No podía oír lo que hablaban, pero por sus gestos y llantos parecía que se lamentaban del suceso. En el centro un niño de corta edad tumbado en el suelo, acertadamente pensé que no respiraba.
--Y fue entonces cuando lo entendí todo. Yo era aquel niño indefenso. Por fin había logrado cumplir lo estipulado. En mi otra vida anterior mi misión era morir en la silla eléctrica, fui un ser despreciable que no merecía otra cosa, y por azares de la vida, esta condena no se cumplió, la muerte sobrevino por causas naturales. Y eso no era lo que había pactado cuando me incorporé en aquel cuerpo. Me quedaba un acto importante que cumplir para cerrar el ciclo.-
-Mientras estuve en el vientre materno sabía muy bien cual era mi misión, mi muerte tenía que ser debida a una descarga eléctrica. Lo supe durante los nueve meses, pero nada más nacer se me perdió toda la memoria, y no la he vuelto a recuperar hasta hoy, al ver al niño sin vida debido a que se acercó a unas obras que los operarios dejaron por unos momentos sin vigilancia. Allí estaban los cables, al descubierto.
--No sabía con certeza qué me impulsó a acercarme hasta allí, iba descalzo porque veníamos de la playa, y mi cuerpo húmedo no tuvo ninguna traba, para captar, con mis dedos infantiles y curiosos, el alto voltaje de aquellos cables.
--Una vez hecho esto, me sentí liberado. Ya había cumplido con la misión que tiempo atrás se me había encomendado. Lo vi todo como si se tratara de una película. Me vi en mi anterior vida plagada de escenas violentas cuyo final fue la cárcel y la condena morir electrocutado. Aquello no llegó a cumplirse, por lo que me quedaba aún esta asignatura pendiente. Debía volver a la tierra para terminar el ciclo que se me había impuesto desde mucho tiempo atrás. La palabra exacta no es tiempo, allí no existe. Transcurre muy diferente que en la Tierra.
--Ahora estaba libre. Por fin encontraría la paz prometida al haber cumplido con todos los requisitos impuestos. --Me quedé unos momentos, viendo cómo la gente lloraba alrededor de aquel cuerpo pequeño sin vida.
--Me alejé, ya tenía el camino libre. Podría regresar al lugar donde todo es nada. Donde no existía ni la vida ni la muerte, allí vagaban en espera de encontrar un cuerpo donde cobijarse, y empezar un nuevo ciclo. Si se cumplían los requisitos, podía ser el fin de una tarea, de lo contrario, se tendría que volver a empezar de nuevo, sin tener almacenado en la memoria cual sería el camino a seguir.--
--Y fue entonces cuando lo entendí todo. Yo era aquel niño indefenso. Por fin había logrado cumplir lo estipulado. En mi otra vida anterior mi misión era morir en la silla eléctrica, fui un ser despreciable que no merecía otra cosa, y por azares de la vida, esta condena no se cumplió, la muerte sobrevino por causas naturales. Y eso no era lo que había pactado cuando me incorporé en aquel cuerpo. Me quedaba un acto importante que cumplir para cerrar el ciclo.-
-Mientras estuve en el vientre materno sabía muy bien cual era mi misión, mi muerte tenía que ser debida a una descarga eléctrica. Lo supe durante los nueve meses, pero nada más nacer se me perdió toda la memoria, y no la he vuelto a recuperar hasta hoy, al ver al niño sin vida debido a que se acercó a unas obras que los operarios dejaron por unos momentos sin vigilancia. Allí estaban los cables, al descubierto.
--No sabía con certeza qué me impulsó a acercarme hasta allí, iba descalzo porque veníamos de la playa, y mi cuerpo húmedo no tuvo ninguna traba, para captar, con mis dedos infantiles y curiosos, el alto voltaje de aquellos cables.
--Una vez hecho esto, me sentí liberado. Ya había cumplido con la misión que tiempo atrás se me había encomendado. Lo vi todo como si se tratara de una película. Me vi en mi anterior vida plagada de escenas violentas cuyo final fue la cárcel y la condena morir electrocutado. Aquello no llegó a cumplirse, por lo que me quedaba aún esta asignatura pendiente. Debía volver a la tierra para terminar el ciclo que se me había impuesto desde mucho tiempo atrás. La palabra exacta no es tiempo, allí no existe. Transcurre muy diferente que en la Tierra.
--Ahora estaba libre. Por fin encontraría la paz prometida al haber cumplido con todos los requisitos impuestos. --Me quedé unos momentos, viendo cómo la gente lloraba alrededor de aquel cuerpo pequeño sin vida.
--Me alejé, ya tenía el camino libre. Podría regresar al lugar donde todo es nada. Donde no existía ni la vida ni la muerte, allí vagaban en espera de encontrar un cuerpo donde cobijarse, y empezar un nuevo ciclo. Si se cumplían los requisitos, podía ser el fin de una tarea, de lo contrario, se tendría que volver a empezar de nuevo, sin tener almacenado en la memoria cual sería el camino a seguir.--